En Paicol, Huila, permanece el respirador artificial elaborado con elementos caseros. Su diseñador asegura que con mejores recursos podría quedar más sofisticado.
Carolina Argüello Cruz
La mente en tiempos de cuarentena no tiene límites. O si no, que lo diga Jorge Luis Vargas Cabrera, quien con un secador de pelo, una manguera de lavadora y un snorkel realizó un prototipo de respirador artificial.
Asegura que con mejores medios y más recursos se puede realizar algo mucho más sofisticado. Sin embargo, para lo que él necesita, es suficiente el que realizó.
Este joven de 34 años nacido en Paicol, Huila, pero que reside en Bogotá, asegura que al ser su progenitora una persona diabética sintió la necesidad de ‘prepararse’ por si se llegaba a enfermar en estos tiempos de coronavirus, pues aunque el virus no ha llegado a este municipio ubicado en el occidente del Huila, sabe que los recursos en los pueblos son escasos en materia de salud.
“Soy técnico en electrónica, mecatrónica y mecánico industrial del Sena y terminé un curso de mecatrónica automotriz, también, en el Sena. Yo me sentí con la obligación de hacer algo por tratar de preservar la vida de ella y de paso poder ayudar para que se pudiera desarrollar o mejorar el invento para aportar un granito de arena a la sociedad; además tenía en casa los elementos que ocupé para enviárselo a mi mamá”, explicó.
Este proyecto de respirador artificial tiene un circuito electrónico que funciona con un temporizador y un trimmer, por lo que el equipo activa y desactiva un ventilador sacado del secador de pelo para ingresarle aire al paciente. Jorge Luis afirma que, si se le colocara una electroválvula con algún oxígeno tipo medicinal bajo el criterio de personal médico especializado, el equipo podría salvar muchas más vidas.
“Es un equipo realizado de manera casera porque no tengo medios ni recursos para haber hecho un mejor prototipo, pero la idea básica es que con el poco conocimiento que tengo de electricidad y electrónica pude desarrollar la parte de control para que acá en Colombia podamos elaborar los muchos respiradores que se necesitan en este momento”.
En dos días sacó adelante este proyecto que ya reposa en su casa natal en los brazos de su mamá, quien espera no llegar a necesitarlo.
Su visión con este, su invento en cuarentena, es que muchas personas lo adopten como un mecanismo de salvar y preservar la vida en tiempos de coronavirus.
“Ahora que lo analizo, como dije anteriormente, el equipo adaptado mucho mejor y con criterios médicos podría salvar vidas, es algo de fácil construcción, económico de hacer y realmente lo que hace es una etapa de control para regular una entrada de aire. Ojalá puedan apoyar la industria nacional y no depender tanto de otros países porque eso nos afecta mucho y pienso que acá en Colombia hay mucho talento para que la gente y los estudiantes podamos realizar cosas buenas”, puntualizó el joven Vargas Cabrera, quien por cuestiones de trabajo tuvo que quedarse pasando la cuarentena junto a su esposa en Bogotá.
Jorge Luis trabaja en una empresa donde debe hacer reparaciones a carros, camiones, grúas, plantas eléctricas y especialmente a maquinaria amarilla.
Características
Se realizó con un circuito variable LM 555 que tenía de cuando estudiaba electrónica, tiene, también, una fuente de voltaje sacada de un adaptador, se le colocó un secador de pelo, una manguera de desagüe de una lavadora y un snorkel para introducir en la boca para que entre el aire. Este equipo tiene una velocidad controlada por un potenciómetro y el objetivo es que ayude a respirar el pulmón cuando se encuentre afectado.
