Días críticos está enfrentando la ciudad de Neiva por cuenta del acecho de delincuentes dedicados a los robos, atracos a mano armada y asaltos a viviendas y establecimientos comerciales. Las escenas de sujetos armados intimidando y despojando a los ciudadanos de sus pertenencias se han vuelto cada vez más recurrentes.
El asunto es complejo porque la capital huilense ha soportado en este 2024 una oleada de atentados terroristas por parte de las disidencias de las Farc para presionar el pago de extorsiones. Esto ha generado un gran clima de nerviosismo, particularmente, entre los comerciantes. Adicionalmente, ha representado un golpe a la inversión, el empleo y el turismo.
Ahora, los neivanos se enfrentan a una escalada de atracos, que está aquejando al ciudadano de a pie porque cada episodio genera no solo una afectación personal sino que llena de miedo a comunidades enteras. Los videos difundidos en redes sociales en donde se ven las incursiones de delincuentes ‘disparan’ los niveles de percepción negativa sobre la seguridad en Neiva.
Aunque las cifras oficiales, según la Policía Metropolitana de Neiva, no están tan elevadas frente a las del año pasado, en las calles los neivanos sienten miedo. Casi 4.000 robos en 9 meses es un dato que no se puede menospreciar ni hacerlo parecer normal.
Evidentemente, se requieren acciones urgentes. Si bien desde la administración municipal han anunciado más cámaras de seguridad, eso no es todo. Es necesario reforzar los patrullajes y vigilancia en las calles no solo con personal uniformado sino con policías encubiertos, fortalecer la capacidad de inteligencia y de investigación judicial, animar las redes ciudadanas de información, promover un plan de recompensas, entre otras acciones. Es necesario revisar los problemas que está teniendo la gente a la hora de denunciar o por qué muchos delincuentes terminan en las calles después de ser capturados.
Constitucionalmente, la Policía es la responsable de la seguridad ciudadana y no puede ser inferior a este reto. El coronel Alexander Castillo, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, tiene la palabra.