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Los Gaulas de la Policía y del Ejército y el CTI de la Fiscalía desplegaron operativos en el centro del departamento.
HUILA

Tres secuestros, en un mes

Un nuevo secuestro se registró en el Huila, esta vez en la vereda El Cedral del municipio de Garzón. Al parecer, disidentes de las Farc plagiaron al joven, Duván Barrera Ceballos, de 19 años de edad. Los Gaulas de la Policía y del Ejército y el CTI de la Fiscalía desplegaron operativos en el centro del departamento.

Johan Eduardo Rojas López

johan.rojas@lanacion.com.co

La familia del joven Duván Barrera Ceballos se suma al dolor, zozobra e incertidumbre, de los parientes del caficultor Álvaro Losada Vega y la comerciante Ángela Valentina Gómez Campos, dado que tiene un común denominador: sus allegados han sido secuestrados.

Los tres hechos que se registraron en el último mes fueron consumados, al parecer, por las disidencias de las Farc. Los dos primeros, en el occidente del departamento -El Pital y La Plata-, y este último en Garzón, centro del Huila.

El joven desapareció desde el viernes 21 de septiembre en horas de la noche, pero se informó por parte de la familia propietaria de camionetas de servicio público, el sábado 22, durante la mañana. Por ahora, el caso se maneja con pleno hermetismo.

Secuestro confirmado

Juan Carlos Casallas Rivas, secretario de Gobierno, Seguridad y Asuntos Comunitarios del Huila, dijo que el reporte oficial derivado de una información de inteligencia confirma un nuevo caso de secuestro en el Huila.

“Ya se tiene desplegado todo el dispositivo de inteligencia, hizo presencia el Gaula Militar y se están adelantando labores de investigación para identificar los móviles, las circunstancias y, por supuesto, el grupo responsable de este hecho”, sostuvo el jefe de la cartera.

Mencionó además que, en los tres casos las autoridades competentes vienen avanzando en el trabajo correspondiente y actividades de inteligencia que hace parte de la reserva, en aras de conseguir la libertad de los hoy secuestrados.

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Hipótesis

A su vez, Elkin Lloreda Gómez, secretario General y de Convivencia Ciudadana de Garzón, le contó a LA NACIÓN que, de acuerdo a información suministrada, el secuestrado es un joven de 19 años de edad. Añadió que los hechos ocurrieron en la vereda El Cedral de esa municipalidad, en donde residía la víctima junto a su familia.

“La información que tenemos es que el joven que se desempeñaba como conductor de una camioneta se encontraba en dicha zona realizando labores propias de su labor, sin embargo, lo último que se sabe es que desapareció en dicho lugar, en donde además fue encontrado su vehículo. Según información suministrada por el Gaula de la Policía y del Ejército, este joven, al parecer, identificado como Duván Barrera, se los llevaron unos hombres armados. Se están manejando dos hipótesis: la primera es que pudieron ser hombres de disidencias que operan en el sector, y la otra es que podría ser delincuencia común”, manifestó Lloreda Gómez.

¿Se comunicaron con sus familiares?

Ante esto, ayer mismo en horas de la tarde se desarrolló un consejo de seguridad donde se especificó que sí se trata de un secuestro, por eso, como estrategia se implementaron los acercamientos al lugar de los hechos, para reconstruir a detalle lo sucedido con evidencia testimonial. Adicionalmente, se generó un Plan Candado por parte de la fuerza pública con el objetivo de tener una actividad de reacción adelantada, en caso tal de que se pueda presentar una situación similar.

“Todo ese sector, donde queda La Alejandría y El Batán, es como un corredor, entonces allí ha habido presencia de ese grupo, pero de acuerdo a información suministrada por fuentes humanas, los últimos días no ha habido presencia de subversivos, por eso se manejan esas dos hipótesis. Todavía no se sabe qué dinero les han pedido a los familiares”, dijo el jefe de la cartera, quien también tiene entendido que, los familiares de la víctima dieron a conocer que los llamaron para indicarles que se trataba de un secuestro.

La Defensoría lo había advertido

Mediante la alerta temprana 012 del 2024, la Defensoría del Pueblo había advertido que, debido a la expansión territorial y operación del Estado Mayor Central, EMC, sobre Gigante y Garzón, disidencia de las antiguas Farc-EP, existe un riesgo inminente de violaciones a los derechos humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario.

Allí mismo, el Ministerio Público, indicó que son los Frentes Iván Díaz (Gigante) y Rodrigo Cadete (Garzón), ambos pertenecientes al Bloque Comandante Jorge Suárez Briceño, quienes amenazan el centro del Huila.

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El riesgo era inminente

Dentro de la misma alerta, la Defensoría del Pueblo argumentó que el riesgo identificado es inminente, pues es altamente probable “la consumación de nuevos hechos de violencia armada en perjuicio de la población civil, y de manera selectiva y diferencial en contra de personas líderes y defensoras de derechos humanos, personas defensoras del medio ambiente, personas en proceso de reincorporación, sus familias y formas organizativas”.

Es así como, “la alerta temprana de inminencia tiene como objetivo”, de acuerdo con el documento, movilizar la respuesta institucional al riesgo identificado en estos dos municipios del centro-oriente huilense, impulsando la adopción e implementación de medidas necesarias, oportunas e integrales entre los diferentes niveles administrativos del Estado colombiano y demás entidades competentes, para garantizar la vida, integridad, seguridad y libertad de sus pobladores, tanto en áreas rurales o urbanas.

Si se comprueba que el Frente Rodrigo Cadete, está detrás del secuestro, las autoridades militares y de policía, a pesar del cese al fuego que los cobija, podrían dirigir operativos ofensivos en contra de ellos.

“Yo quiero decirlo, siendo víctima del conflicto, no puede utilizarse el secuestro como un arma política. La población civil hay que excluirla del conflicto armado. Bajo el rigor de las balas no se va a llegar a nada, hay que dialogar, porque a punta de plomo no vamos a llegar a nada bueno. Nosotros atendimos esa alerta temprana, pero también hicimos ese llamado a las autoridades competentes para que tomaran las acciones necesarias y evitar eso que hoy en día está sucediendo. No sabemos por qué sucedió esto, si de pronto les estaban pidiendo una cuota o qué”, dijo el diputado Armando Acuña.