Quien no conoce su historia está condenado a repetirla. Por eso, la importancia de hacerlo, pero en Colombia en muchos casos, nos la cuentan sesgada y según los intereses de quien lo hace. Y eso es grave. Nos está llevando a repetir lo ocurrido en forma sistemática.
Miremos lo que está pasando con la violencia en nuestro país, es el mejor ejemplo. Nos han mostrado la mala cara de los paramilitares y razón tienen. La violencia con la que actuaron y la cantidad de víctimas inocentes lo justifican. Pero nos esconden la verdadera razón por la que se crearon esos grupos. Distorsionan el cuento, para afectar a enemigos políticos o para justificar errores propios.
Según la revista SciELO Chile, y algunos otros medios, los paramilitares surgieron por “la ideología anticomunista que profesan la mayoría de los miembros de las fuerzas armadas, la cultura política derivada de la violencia, la corrupción y el clientelismo, así como el narcotráfico, …”.
Mentira. Estos elementos incidieron en su deterioro moral y algunos que con el tiempo formaron parte de ellos, aprovecharon para actuar en actividades ilícitas. Pero la verdadera razón por la que se crearon los grupos de autodefensas en los años 70, en la región del Magdalena Medio, es otra.
En esa década, no fue el enemigo del pensamiento de izquierda el que generó los movimientos de autodefensas, que después degeneraron en otra cosa, es diferente. Fue la violencia extrema de las guerrillas y la falta de protección del estado, lo que los propicio. La indefensión de los ciudadanos, y la violencia desmesurada, el secuestro y ‘boleteo’, así como el asesinato indiscriminado de ciudadanos por parte de la guerrilla, era ‘pan de cada día’. A la gente le tocó organizarse para proteger lo suyo.
Estamos repitiendo la historia, abran los ojos. Las disidencias y grupos guerrilleros tienen nuevamente arrinconada a la población. El estado se hace ciego y sordo ante lo que pasa, razón por la cual ya se habla de ciudadanos que quieren organizarse para defenderse. Saldrán algunos a decir que esa es la derecha que quiere tumbar al presidente. No, es la gente ‘mamada’ nuevamente del boleteo y la violencia que no encuentra otra salida. Si el estado actúa y acaba con el actuar delictivo de la guerrilla, la gente se sentirá protegida y no pensará en armarse
Pero, cual es la razón por la cual el gobierno nacional, se hace el pendejo ante el tema. ¿Será que le conviene fortalecer las guerrillas en algunas zonas del país para tener el control electoral en su favor e imponer su constituyente popular? Juzguen ustedes.