Para la representante a la Cámara, Catherine Juvinao la reforma laboral tiene “algunas cosas rescatables”, y entre ellas están, que propende porque los espacios laborales sean seguros y libres de violencia y discriminación, y traza medidas para formalizar a las madres comunitarias, “nos parecen también muy importantes”.
De otra parte, hay otros puntos de la iniciativa del Gobierno Nacional que son “un poco más complejos y tenemos una preocupación de cómo puedan impactar a las mipymes”.
Aseveró que el “principal error de criterio de este gobierno es creer que todas las empresas en Colombia son las de Sarmiento Angulo, Ardila Lule y de los Santodomingo. Sabiendo que del 1,6 millones empresas que hay en el país, 1,5 millones son pequeñas y microempresas”.
En suma, no está de acuerdo en imponer “costos súbitos que estas empresas no pueden soportar”.
Anunció que mañana miércoles sería la última plenaria para que el proyecto de reforma pase en su segundo de cuatro debates. “En Cámara, sin duda, la reforma laboral va a pasar porque, como la opinión pública se ha dado cuenta, el presidente Gustavo Petro tiene mayorías en la Cámara”. Sin embargo, “es en el Senado, donde se le complica un poco el ‘caminao’, porque en la Comisión Séptima no tiene mayorías”.
Si no se ajustan algunos artículos, que pueden “crear más desempleo y más informalidad”, podría estar tambaleando en tercer debate, advirtió. Lo más delicado es el tema de los recargos nocturnos.