Está definido que Wilker Bautista no será el nuevo Director Regional del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en el Huila, a pesar de que en cada esquina o en cada conversación de cafetería se ufana de ya tener todo listo para la posesión.
El hoy procesado por actos de corrupción, cuando fue gerente de empresas públicas de Algeciras, no ha tenido éxito en las gestiones con el Gobierno Nacional, además porque ni el mismo Gorky, su socio, lo ha acompañado en esas correrías y negociaciones, que para este tipo de cargos, tienen que ver con acuerdos por votos y burocracia.
Cada semana alguien resulta en Neiva con el cuento de que la terna para el ICBF ya se definió. Lo cierto es que aún falta la última etapa, la entrevista, que otorga el 15% del puntaje. Ya se surtió la etapa de la prueba escrita de conocimientos, competencias y aptitudes que tuvo un valor del 60%, también ya se hizo la prueba de valoración de antecedentes de formación académica y experiencia, con valor del 25%.
Los participantes tuvieron hasta el fin de semana pasado para manifestar su deseo de presentar la entrevista, una confirmación bastante rara en el entendido que precisamente para eso se presentaron al concurso. Por ahora hay seis finalistas empatados con 100 puntos, son ellos, Juan Pablo Barbosa, Wilker Bautista, Luis Alfredo Carbayo, Mónica Sánchez, Breidy Fernando Castro y Duayen Marleivy Cortes, esta última, considerada la “carta tapada” de Villalba para la dirección de la entidad.
Precisamente a manos del Gobernador llegará la terna y será él quien tenga la potestad de elegir al ganador, o en este caso ganadora. Villalba siempre ha sabido muy bien como jugar sus cartas, es un viejo zorro, al punto que ni siquiera en el “Gobierno del Cambio” le quitaron el dominio de entidades como la Corporación Autónoma del Alto Magdalena, La Universidad Surcolombiana o el Hospital Universitario, entre otras instituciones, que históricamente le han pertenecido y donde ha manifestado toda su voracidad contractual y clientelista. Camaleónicamente se ha acomodado al Presidente de turno para que “no le toquen lo suyo”. En el proceso de elección de la dirección regional del ICBF ha sabido medir los tiempos, incluso hasta ha mostrado desinterés. ¿Creen ustedes que Villalba no se lame los bigotes por clasificar a su candidata en la terna y dejar el camino listo?
Paradójicamente la entrevista es la etapa más liviana, la de menor puntaje, pero la que terminará definiendo si Villalba se apodera de otra entidad estatal.