El departamento y el país está conmocionado por la violencia contra los menores de edad. En Huila, el 96% de los abusadores sexuales de niños y niñas son hombres y el principal escenario del hecho es la vivienda. Según informe de Medicina Legal, el 88% de las víctimas son mujeres.
Los recientes hechos de menores abusados sexualmente en Colombia, que además fueron asesinados por sus verdugos como fue el caso del niño Alexis Delgado de dos años de edad, quien pereció a manos de su tío político, Carlos Herrán Rodríguez, pone de manifiesto que en Colombia este tipo de delitos continúan presentándose a diario y en todos los rincones del país.
En nuestro país la violencia sexual infantil es un asunto público de gran preocupación, debido a que los niños, niñas y adolescentes son sujetos de especial protección por a su condición de vulnerabilidad, lo que lleva a que desde el Estado se promueva su dignidad.
Pero, a pesar de las campañas y penas impuestas, los abusadores siguen sumando víctimas sin ningún temor, pudor y/o arrepentimiento.
En Huila, por ejemplo, incluyendo todos los grupos etarios, se han reportado 556 casos de violencia sexual en lo corrido del año y, de estos, en el 77% (430) de las víctimas han sido menores de edad, según expone un informe del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses con corte a septiembre.
Sin embargo, las autoridades también recalcan que existe un subregistro en las cifras de violencia sexual contra menores: muchos sucesos no son denunciados, entre otros factores, porque en la mayoría de los hechos, los responsables son integrantes de la misma familia, incluso, los agresores pueden ser los adultos encargados de instaurar la debida denuncia formal ante las autoridades.
Eso además de impedir penas ejemplares, imposibilita que los menores y personas víctimas puedan recibir un acompañamiento eficaz para tratar las secuelas y consecuencias que se derivan de los abusos.
Tenían menos de cinco
Es muy lamentable apreciar que en Huila, según las cifras de Medicina Legal, 18 infantes abusados tenían menos de cinco años de edad. Además, otras 87 víctimas se encontraban entre los cinco y nueve años, y el grupo etario con más casos reportados es entre 10 y 14 años con 259 víctimas. De igual manera, 66 adolescentes violentados adicionales tenían entre 15 y 17 años.
Solamente en 17 casos el presunto agresor de los niños y niñas era un desconocido. La realidad es que este tipo de delitos son cometidos en la mayoría por familiares (50%) como el abuelo, cuñado, el hermano, uno de los mayores victimarios es el padrastro, pero también figuran los padres, primos y tíos, así como el novio de la o el menor de edad.
Las mayores amenazas para los menores son los hombres, además, los infantes no están seguros ni en las casas. En nuestro departamento, concretamente el 96% de los abusadores sexuales de niños, niñas y adolescentes son hombres, quienes perpetraron 417 casos de los 430 reportados.
Y en lo que respecta a escenarios, el informe muestra que el 76% de los hechos contra los menores ocurrieron en la vivienda; continúan sucediendo tanto en las cabeceras municipales, centros poblados, como en las veredas.
Salvo solamente cinco municipios; Baraya, Palestina, Tello, Teruel y Tesalia, en todos los demás se han reportado casos de violencia sexual en lo corrido del presente año a septiembre. Neiva y Pitalito lideran con las mayores cifras de denuncias.
Así las cosas, el documento expone que este tipo de violencia continúa presentándose en todas las comunidades y afecta a todas las personas sin distinción de su género, edad, raza y clase; sin embargo, existen poblaciones mayormente vulnerables, como lo son las mujeres menores de edad.
Y es que las niñas y mujeres adolescentes menores de edad, representan el 88% de las víctimas de abuso sexual el Huila (381).
¿Por qué siguen violentando?
Para el personero de Neiva, Jerson Andrés Bastidas, entre las razones para que continúen presentándose este tipo de delitos, figuran las dificultades y crisis en la estructuración de valores y principios en la familia. Son componentes psicosociales, “más que jurídicos y judiciales, porque la parte judicial se activa cuando ya se han consumado los hechos”, anotó.
La sociedad y las instituciones muchas veces llegan al momento de la reacción sobre el hecho, “se busca, se judicializa y sanciona, pero realmente eso no ataca la causa del problema, que deriva de una problemática de estructura de sociedad asociada a la falta de valores y principios, de reconocimiento e intervención clínica a tiempo de las personas que presenten rasgos y comportamientos asociados a este tipo de problemas”.
Expertos han concordado en que, pese a contar con distintos marcos legales que pretenden proteger la integridad de los seres humanos, especialmente de derechos de los niños, niñas y adolescentes, se ha observado un gran riesgo en la protección de esta población, debido a que en primer lugar las leyes se van rezagando en comparación a la evolución de los fenómenos sociales.
En segundo lugar, debido a que, pese a que sean sujetos de especial protección y se haya proclamado el deber del Estado de propender por una prevención y reparación efectiva, el sistema judicial no tiene la capacidad de responder a dichos mandatos.
Es un problema social con un gran nivel de complejidad y múltiples aristas que impiden su atención y prevención integral.
En suma, los expertos sugieren que como sociedad es importante avanzar en la construcción de mecanismos que permitan sensibilizar a las familias, las instituciones educativas y el Estado sobre los derechos de la niñez y la cero tolerancia de la violencia sexual.
Allí tiene un rol primordial las instituciones educativas, ya que son espacios que tienen un rol en los procesos de educación sexual de niños, niñas y adolescentes. Así mismo, tienen un potencial en la detección de casos y activación de rutas de protección.
¿Qué se está haciendo?
En medio de este panorama del país y del cual Huila no es ajeno, la Procuraduría General de la Nación informó que le pidió ‘cuentas’ al Ministerio de Justicia y a las entidades que hacen parte del Comité Interinstitucional encargado de la prevención y atención a las víctimas de abuso sexual. Les solicitó detallar las acciones realizadas para la reglamentación e implementación del Sistema Nacional de Alertas Tempranas para la prevención de la violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes.
El requerimiento a las autoridades se deriva de las alertas generadas frente a las cifras de violencia sexual contra esta población y por algunas barreras, como “en la activación de ruta de acceso a la justicia a las víctimas, la falta de activación de ruta ante el sector salud para la atención y en instituciones educativas, la usencia de articulación con Ministerio de salud y Ministerio de Educación, la falta de presencia institucional en regiones apartadas o imposibilidad de las instituciones en llegar a esas regiones y los tiempos de respuesta institucional, entre otras”, señaló.
Así mismo, y frente al alarmante panorama de violencia contra menores de edad, el ente de control confirmó la constitución de una agencia especial para intervenir, en calidad de Ministerio Público, en el proceso penal adelantado por la Fiscalía por el homicidio y abuso sexual del niño Alexis Delgado.
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