“Vengo a poner la cara”, dijo a LA NACIÓN el presunto asesino de Yessica Paola Rodríguez Quevedo, quien se presentó ayer de manera voluntaria en el búnker de la Fiscalía, por el crimen de la mujer el pasado 27 de noviembre en un motel del sur de la ciudad de Neiva. Su abogado dice que el delito de su cliente no cumple los requisitos para considerarse un feminicidio.
13 días después del crimen de Yessica Paola Rodríguez Quevedo, se entregó de manera voluntaria José Antonio González, señalado de ser el responsable de haberle arrebatado su vida al interior de un motel en la Zona Industrial de Neiva.
El hombre acudió ayer a las instalaciones del búnker de la Fiscalía, acompañado de su abogado, para dar la cara frente al homicidio de la mujer, en el que asegura que lo hizo en defensa propia.
Por fin capturado
“Vine a entregarme voluntariamente al CTI de la Fiscalía, para aclarar bien los hechos. Yo eso lo hice no por mi intención, sino por defensa propia, fue del susto porque ella me tiró para acabar conmigo, entonces le quité el arma y reaccioné, la intención mía no era matarla porque no estoy acostumbrado a eso”, explicó José Antonio ante los micrófonos de este medio de comunicación.
Día del crimen
La habitante de 31 años de edad, murió en el baño del motel Las Acacias, ubicado en la carrera Quinta con calle Diecinueve Sur de la capital huilense, donde se encontró con el hombre, en la tarde del pasado miércoles 27 de noviembre de 2024.
La víctima mortal fue hallada desnuda en el baño de la habitación con 23 puñaladas en diferentes partes del cuerpo. En ese momento, su acompañante la había abandonado, aludiendo que iría a buscar comida; sin embargo, nunca regresó.
Yessica al parecer había tomado la decisión de ponerle punto final a ese amorío, y se lo había hecho saber a su victimario, quien presuntamente la había amenazado. Las hermanas de la fallecida aseveraron que ella fue seducida a asistir al lugar con la promesa de recibir una nueva ayuda económica.
¿Fue una trampa?
Según Yuri, hermana de Yessica, pese a la negativa de continuar sus encuentros con Antonio, accedió porque “él le ofreció más plata de la que le daba, entonces, pues tiene sus hijitos, siempre ha luchado por ellos, entonces por eso creo que accedió ir allá y el man la llevó con ilusiones, dándole promesas que no eran y ahorita dice que todo lo que me le hizo a mi hermana fue por defensa propia”, recriminó la mujer.
La ciudadana era madre cabeza de hogar de cuatro hijos que responden a los nombres de Johan Herney, Danna Alexandra, Nathalie Paola y Jhon Alexander Guaca Quevedo, de 15, 11, 9 y 6 años de edad, respectivamente.
“A mí él no me daba tanta confianza porque un día peleó con mi mamá, por eso yo no quería que ella se fuera a ver con él, pero no me hizo caso y se fue”, relató Danna Alexandra, de 11 años de edad, hija de Rodríguez Quevedo.
Sobre la relación que sostenían, el individuo de 54 años de profesión agricultor precisó: “Llevábamos molestando casi dos años, porque yo nunca conviví con ella, lo que ella me pedía por teléfono, yo le colaboraba sin ningún interés”, puntualizó.
Además, fue enfático en que nunca estuvo dándose a la fuga, sino por el contrario, estuvo planeando cómo sería su entrega ante las autoridades.
Su defensor, Jorge Enrique Cortés Polanía, añadió que el hombre va a responder bajo la calidad y los requisitos que exigen las conductas que mi representado ha cometido, esperando que a través de las audiencias preliminares se pueda determinar que no se cumplen los requisitos para establecer el delito de feminicidio.
¡Arrepentido!
“Yo entiendo lo que hice, no debí haber hecho eso. Me da pena con la humanidad, con la gente, porque a mí me conocen en Santa María, Palermo. Yo quiero pedirles disculpas a ellos y decirles que eso no volverá a ocurrir. La familia me sabrá perdonar, pero, de todas maneras, mi intención no fue esa, yo le colaboré en lo que más pude”, afirmó el procesado.
Fue ante los funcionarios del CTI de la Fiscalía y de la Sijin de la Policía Metropolitana de Neiva que se oficializó la captura contra el señor González, por el delito de feminicidio. Allí, los uniformados le dieron a conocer sus derechos y lo ingresaron a una de las celdas de la Fiscalía.
Hoy, el señalado será presentado en audiencias ante un juez de control de garantías para que le defina su situación penal. “El caso no reúne las características establecidas para que se pueda tener esa conducta como tal para imputar”, concluyó su defensor al insistir en que no se trató de un feminicidio.
El litigante finalizó asegurando que: “Tomando el punto de partida por el delito de homicidio, que puede tener la característica de agravado, se iniciaría con una pena de 25 años. Estamos preparados para mañana (hoy) las audiencias preliminares”.
