La historia del cine de ciencia ficción vivió uno de los capítulos más importantes esta semana, el motivo, la llegada de ‘Interstellar’ del director británico Christopher Nolan, y no es para menos, elmarketing y la generación de expectativa de la cual son directamente responsables Nolan y su esposa la productora Emma Thomas antecede en conjunto a una de las obras más representativas de este género.
Esta película no decepciona ni en los efectos especiales -dato curioso: asesorados por uno de los físicos más importantes de la actualidad como lo es Kip Thorne representan por primera vez como se vería en realidad un agujero negro, descubrimiento que de por sí ya vale la entrada- ni en la construcción narrativa de sus 169 minutos que a la final hasta pueden parecer cortos. Nolan que no deja de lado su montaje paralelo (en el mismo lapso de tiempo desarrolla dos historias a la vez) sello característico de su obra, trabaja con éxito los ritmos de la película soportados casi a la perfección por la banda sonora del multi premiado y glorificado Hans Zimmer y que termina siendo en conjunto una película para ver independientemente de las preferencias que se tengan como espectador.
Obviamente la película es una gran homenaje a la obra más importante cinta de ciencia ficción: 2001 ODISEA EN EL ESPACIO (1968) de Stanley Kubrick, desde luego sin el surrealismo apabullante, pero si con la necesidad de responder los cuestionamientos sobre lo que nos define como humanidad, incluso, mas allá de las estrellas. Los robots: Tras y Case, y una referencia al engaño del viaje a la luna -teoría conspirativa a la que se le adjudica la dirección al mismísimo Kubrick- son algunas de las referencias a esta cinta sin dejar de lado a SOLARIS (1972) y EL ESPEJO (1975) del gran Tarkovsky.
La escogencia del casting (grupo de actores) sigue siendo impecable como ya lo ha sido en sus demás títulos, un Matthew McConaughey perfecto para el papel reafirma indiscutiblemente porque se ganó el premio de la academia, una Jessica Chastein que refuerza su carácter actoral colocándola en este momento junto a Jennifer Lawrence como las actrices más solicitadas y aclamadas en Hollywood, una Anne Hataway que logra una evidente conexión con el espectador cuando su personaje -Amelia Brand- devela lo que perfectamente podría ser la frase estandarte de la película: "El amor es la única fuerza que trasciende las dimensiones del espacio y del tiempo”. Sumado a eso un magnífico Michael Caine, un desaprovechado Casey Afleck y un fugaz pero importante Matt Damon, ayudan a construir con sus actuaciones un gran relato en definitiva.
La adaptación es el tema general, todos sus personajes al igual que el ser humano ya sea como individuo o como miembro de una sociedad, se tienen que adaptar incluso a veces teniendo que dejarlo todo para adentrarse en lo desconocido guiados únicamente por la brújula del amor para poder trascender, y no solo para sobrevivir, si no para poder vivir, sentir, amar, porque debido a esto y los indescriptibles cúmulos de sentimientos y aquellos pasos de fé que sólo el ser humano puede experimentar es por lo único que nosotros como especie merecemos ser salvados.
Como otro dato curioso anexo el link del cortometraje con el que Christopher Nolan se graduó de director:
http://bit.ly/1EkB1bY