Las últimas tres semanas la Institución Educativa Humberto Muñoz Ordóñez de Pitalito ha sido protagonista no precisamente por destacados logros académicos, sino por manifestaciones y constantes bloqueos de estudiantes y padres de familia, que por las vías de hecho exigen rendición de cuentas y la salida inmediata del Rector.
Ante los constantes reclamos, una comisión de la administración municipal realiza una auditoría que le permitirá establecer qué está pasando al interior del centro educativo. Participan del proceso veedores ciudadanos y padres de familia, quienes aseguran tener pruebas de doble facturación y otras irregulares en el manejo de los recursos.
En el Concejo Municipal de Pitalito, Ciro José Vega, rector del colegio Humberto Muñoz Ordóñez, se defendió de las acusaciones y negó todas las irregularidades en su contra. Sus argumentos dividieron a los cabildantes entre quienes creen en su gestión y los que consideran que está mintiendo y debe responder con la verdad los cuestionamientos de la comunidad.
La defensa
El rector Ciro José Vega sostiene que está tranquilo y que no tiene nada qué temer de la auditoría que realiza la Secretaría de Educación en el colegio que está bajo su dirección.
“La gente en la calle me dice que soy un pícaro, un ladrón, pero yo tengo claro lo que he gestionado para la institución, las obras grandes y el rendimiento académico superior a los 310 puntos de las Pruebas Saber. Me siento ofendido en mi honor y mi honra; cuando salgo del colegio algunos estudiantes me gritan rata, cuando salgo a la calle la gente me dice ladrón y tantas cosas. Estoy en el suelo porque unas personas llegaron a acabar con mi vida, lo único que he hecho es trabajar por Pitalito, formar personas con metas, con sueños, me siento orgulloso de ser maestro, pero desafortunadamente me quieren sacar y no es la primera vez que pasa”, expresó el rector Ciro ante los concejales.
Los docentes
El profesor Alberto Rubiano cuestionó los reconocimientos que recibió el Rector en el Concejo Municipal, considerando la sesión como una lluvia de panegíricos, felicitaciones y agradecimientos al funcionario, derivado claramente de la amistad y nada relacionado con su labor en el centro educativo.
“Vemos que se está evaluando las cualidades humanas del señor Rector y no sus funciones administrativas, que sin duda alguna generan un inconformismo general entre la comunidad; además, los concejales no tienen mayor responsabilidad en el concepto, porque no conocen el manejo ni la forma como marcha el colegio”, apuntó el docente.
Padres de familia
Hernando Zúñiga, presidente de la Asociación de Padres de Familia, quien ha estado al frente de los requerimientos al Rector, sostuvo que su informe de gestión está bien hecho, bien redactado, se ve completo, aparecen muchas cifras, pero la realidad es otra.
“Yo les decía por qué los precios tan altos en las compras, porque no fue transparente en ese proceso. Los concejales lo felicitan por sus 10 años de trabajo, pero ese no es su papel, debería ser un ente de control y no de exaltación, ellos no conocen el manejo, no padecen lo que padecen nuestros hijos, las inconsistencias saltan a la vista, es como tapar el sol con un dedo”, indicó el padre de familia.
Los inconformes con la gestión del Rector espera los resultados de la auditoría, mientras los cerca de 1.500 estudiantes del Humberto Muñoz Ordóñez terminan con una serie de limitaciones su año lectivo. Por su parte, los docentes y padres seguirán exigiendo el cambio de rector, porque la última palabra la tiene la Secretaría de Educación Municipal.
Alberto Rubiano, docente de la IE Humberto Muñoz Ordóñez.
Hernando Zúñiga, presidente de la Asociación de Padres de Familia.