Una fuga de gas sería la causa de que cinco personas, entre ellas tres menores de edad y una mujer con ocho meses de embarazo, resultaran con quemaduras en un percance ocurrido ayer en la tarde en zona rural del municipio de Iquira. LA NACION, Neiva Una fuga de gas sería la causa de que cinco personas, entre ellas tres menores de edad y una mujer con ocho meses de embarazo, resultaran con quemaduras en un percance ocurrido ayer en la tarde en zona rural del municipio de Iquira. Según la información de las autoridades, el hecho se registró en la vivienda propiedad de Román Lame, un ciudadano de 68 años, inspección de Rionegro, Iquira, cuando intentó hacer uso de su cocina, y al prender un fósforo, y sin percatarse que había una fuga de gas, se originó la conflagración que le afectó en varias partes del cuerpo. Las llamas alcanzaron a Yeneida Sofía Reina de dos años, Brayan Manuel Santiago de 12, Darcy Yulina Santiago de 14, y Jackelin Mosquera de 18 años y con ocho meses de embarazo, quienes al sentir la fuerte explosión, ingresaron a la vivienda y sufrieron graves quemaduras. “El vive solo en su casa en Rionegro, y al parecer cuando iba a preparar sus alimentos, no se dio cuenta que había una fuga de gas y por eso al intentar encender la estufa, se presentó el incendio, y el ruido que se presentó fue lo que atrajo a las otras personas que estaban en la calle y por ello resultaron afectadas”, afirmó a LA NACION Nidia Urueña, familiar de Román Lame y quien lo recibió al ingresar a la unidad de urgencias del Hospital Universitario de Neiva, ya que debido a la gravedad de las quemaduras fue necesario su traslado a esta capital. El informe preliminar de los médicos revela que los afectados con esta situación presentan quemaduras de consideración en los brazos y rostro, principalmente, aunque también registran lesiones en otras partes del cuerpo y están siendo valorados por un equipo interdisciplinario. El incidente se registró en la vivienda propiedad de Román Lame, un ciudadano de 68 años, quien sufrió graves quemaduras y recibe atención en el Hospital Universitario de Neiva. Fotos Sergio Reyes