En Neiva se han confirmado en las últimas semanas cinco casos de Leishmaniasis Visceral. Por tal razón, las autoridades de salud adelantan estudios en distintas comunas de la ciudad para caracterizar la enfermedad y emprender acciones para detener el contagio. En Neiva se han confirmado en las últimas semanas cinco casos de Leishmaniasis Visceral. Por tal razón, las autoridades de salud adelantan estudios en distintas comunas de la ciudad para caracterizar la enfermedad y emprender acciones para detener el contagio. LA NACIÓN, NEIVA Debido a los recientes casos confirmados de Leishmaniasis Visceral que se han presentado en Neiva, las secretarías de Salud Municipal y Departamental con el Instituto Nacional de Salud trabajan en las comunas Ocho, Nueve y Diez, con el objetivo de conocer el foco de la enfermedad y tomar acciones correspondientes para frenar la propagación de la misma. La etapa actual de las acciones ha sido denominada por los delegados del Instituto Nacional de Salud como un periodo de estudio, para determinar las características de los casos presentados y trabajar en detener el contagio. “La labor que estamos llevando a cabo con las autoridades de salud consiste en un estudio de foco para caracterizar muy bien la enfermedad y de ese modo tomar decisiones más claras y contundentes, para detener el contagio y trabajar en torno a la prevención. Esta es una etapa de investigación, recolección de muestras en niños y perros, y asimismo se están adelantando acciones de control desde ya, pero luego van a venir unas más puntuales, que estarán a cargo de las secretarías de Salud”, señaló Pilar Zambrano, delegada de Instituto Nacional de Salud. Variedad Los casos de leishmaniasis que se han presentado en Neiva, corresponden a la variedad Visceral, que es distinta a la Leishmaniasis Cutanea, que es la que se padece en las selvas. “Los casos de Neiva son de Leishmaniasis Visceral. Esta puede llegar a ser mortal si no se trata a tiempo, pues el parásito entra al organismo y ataca órganos como el hígado, el bazo, la médula ósea y los ganglios. La Leishmaniasis Cutánea es una enfermedad de piel que también tiene tratamiento, pero no tiene el mismo riesgo de la Leishmaniasis Visceral, aunque ambas son transmitidas por un insecto pero desarrollan un parásito diferente”, comentó Zambrano. Según la delegada, en Colombia existen dos focos históricos en los que se presenta ocasionalmente la Leishmaniasis Visceral. Uno es el foco del Magdalena Medio al cual pertenecen Huila, Cundinamarca y Tolima y el otro es el foco Norte en el que se cuentan Córdoba, Bolívar y Sucre. En el 2004 se presentaron tres casos en la Comuna Ocho y en 2009 se presentaron otros dos casos en el mismo sector. Desde entonces no se habían reportado nuevos casos. Contagio Según lo indicado por Pilar Zambrano, los casos de Leishmaniasis Visceral se presentan por la picadura de un insecto conocido como palomilla, que con antelación se infecta al picar animales silvestres que estén contagiados y que posteriormente puede picar a animales domésticos que frecuenten el bosque como los perros. “El mosquito se puede infectar con unos animales silvestres como zarigüeyas, zorros rabopelados u osos hormigueros, entre otros animales que viven en el monte. Los casos que hemos encontrado acá son casos que están en la periferia de las comunas Ocho, Nueve y Diez, que son sectores donde encontramos barrios o asentamientos en límites con zonas de bosque. En este caso cuando un perro visita esas zonas puede ser contagiado por un insecto infectado y automáticamente se convierte en reservorio de la enfermedad. Al regresar a la vivienda, el perro puede ser picado por una palomilla que aunque no esté infectada, posteriormente pasará a estarlo y podrá infectar a los humanos que viven en el entorno, y que en efecto es la forma de contagio que se ha detectado en los casos presentados”, refirió. El mosquito portador puede picar tanto a niños como adultos, pero en el caso de la Leishmaniasis Visceral, son los infantes menores de cinco años los más vulnerables al contagio debido a factores como deficiencias en su sistema inmunológico y desnutrición. Síntomas En ese sentido la delegada refirió los síntomas comunes de un niño que presenta la enfermedad. “La Leishmaniasis Visceral es una enfermedad que tiene un curso más largo que otras enfermedades como el dengue, un niño puede ser picado y presentar los síntomas en forma progresiva. Por lo general, son niños que consultan constantemente por fiebres periódicas, empiezan a ponerse pálidos, dejan de comer un poco y empieza a inflamárseles el estómago. Es importante que los padres que habitan estas zonas conozcan estos detalles para que consulten e informen a los médicos la forma en que se han presentado los síntomas. Los médicos conocen la situación, han sido sensibilizados y tomarán las medidas pertinentes como exámenes de sangre y muestras para determinar si es positivo el caso”, señaló. Medidas En esta etapa, las autoridades de salud han adelantado investigaciones de campo, recolección de muestras y asimismo las primeras acciones de control. “Estamos haciendo un diagnóstico entomológico para puntualizar cuál es el vector que está participando en la transmisión, los horarios en que hay más abundancia del mismo, se está comunicando a la gente cómo se trasmite la enfermedad, e igualmente estamos tomando pruebas a los perros para saber si están infectados o no. De resultar positivos, los animales deben ser sacrificados porque existe tratamiento para la enfermedad en los humanos, más no para los animales y si no se actúa en esta forma, el perro va a ser portador constante de la enfermedad y la fuente de infección de otros mosquitos que van naciendo; si eliminamos el reservorio vamos controlando el problema. Se ha adelantado la fumigación, pero es de aclarar que la tarea de detener el contagio involucra a las autoridades de salud, pero también a las comunidades”, indicó Zambrano. Recomendaciones Frente al foco, las autoridades han hecho recomendaciones puntuales a los habitantes de las zonas donde se han presentado los casos de la enfermedad. “Estamos adelantado un proceso de estudio que en el término de dos a cuatro semanas nos indicará especificidades del foco que se ha presentado y de allí se podrán emprender acciones puntuales y más efectivas, pero mientras tanto se deben tomar las medidas correspondientes para detener el contagio. De esta forma, estamos aconsejando a las personas el uso del toldillo, igualmente ponerle ropa larga a los niños en las horas que conocemos entra el insecto, que es después de las cuatro o cinco de la tarde y en las noches. Esto es útil porque el mosquito es tan pequeño que no traspasa la ropa”, comentó la delegada. Otras recomendaciones para las comunidades son el ordenamiento y aseo de las viviendas, la recolección de basuras, y hojarascas donde puedan nacer nuevos insectos. A los niños de las zonas visitadas les tomaron muestras de sangre para conocer si presentan la enfermedad. En las visitas a las comunas, los habitantes fueron informados sobre la enfermedad. A los caninos les fueron extraídas muestras para determinar si están infectados.