Los crímenes de lesa humanidad no prescriben con el paso del tiempo y no pueden ser amnistiados, defendió el juez español Baltasar Garzón ante el Tribunal Supremo de su país, que lo juzga por haber querido investigar las desapariciones forzosas del franquismo. MADRID (AFP) Los crímenes de lesa humanidad no prescriben con el paso del tiempo y no pueden ser amnistiados, defendió el juez español Baltasar Garzón ante el Tribunal Supremo de su país, que lo juzga por haber querido investigar las desapariciones forzosas del franquismo. “Mantenía y mantengo que el delito de detención ilegal (…) en un contexto de crímenes contra la humanidad es un delito permanente, porque sus efectos permanecen en el tiempo”, afirmó el juez, demandado por grupos de ultraderecha españoles por haber intentado investigar denuncias de unas 114.000 desapariciones ocurridas durante la Guerra Civil española (1936-39) y la dictadura franquista (1939-75). Estos grupos ultraderechistas lo acusan de vulnerar una ley de amnistía de 1977, que dos años después de la muerte del dictador Francisco Franco selló un pacto de silencio para permitir una transición pacífica a la democracia. “La ley de amnistía se refiere a delitos de contenido político, en ningún caso se puede afirmar que crímenes contra la humanidad de la naturaleza que se denunciaron puedan tener carácter político de ningún tipo”, insistió Garzón. “Por tanto no era necesario ni siquiera hacer referencia a la ley de amnistía”, consideró el juez, de 56 años, mundialmente conocido por la detención del ex dictador chileno Augusto Pinochet en 1998 en Londres. El juez explicó haber recibido a partir de diciembre de 2006 miles de denuncias que “relataban hechos acontecidos durante y después de la guerra civil donde se daban cuenta de desapariciones, de detenciones ilegales, de asesinatos, de decisiones extrajudiciales, de toda una serie de hechos con apariencia delictiva que se calificaban como crímenes contra la humanidad, como genocidio”. Suspendido de sus funciones desde mayo de 2010, de ser declarado culpable el mediático magistrado puede ser condenado a 20 años de inhabilitación profesional, lo que supondría el fin de su carrera. La semana pasada, en el inicio de este proceso, la fiscalía del Tribunal Supremo y la defensa de Garzón habían solicitado el archivo del caso por vicios de forma, que la alta corte rechazó considerando que “no tienen entidad material suficiente para justificar la anulación de las instrucciones”.