La líder opositora birmana Aung San Suu Kyi inició una histórica visita de tres semanas a Estados Unidos, país que apoyó su causa durante largo tiempo y adonde viaja
WASHINGTON (AFP) – La líder opositora birmana Aung San Suu Kyi inició una histórica visita de tres semanas a Estados Unidos, país que apoyó su causa durante largo tiempo y adonde viaja por primera vez desde que salió del arresto domiciliario de más de 20 años al que estuvo sometida. La ganadora del premio Nobel de la Paz aterrizó en el aeropuerto internacional Dulles, cerca de la capital, informó un alto funcionario estadounidense. Se espera que Suu Kyi tome un descanso antes de iniciar conversaciones este martes con la secretaria de Estado Hillary Clinton. Suu Kyi, de 67 años y quien solicitó distancia de las cámaras a su llegada, será recibida el miércoles en el Capitolio, donde se le otorgará la Congressional Gold Medal, la máxima condecoración concedida por el Congreso estadounidense. También visitará Nueva York, Connecticut, Massachusetts, Indiana, Kentucky y California, donde hablará en universidades, recibiendo honores y se reunirá con refugiados birmanos. El presidente Barack Obama probablemente haga un paréntesis en su campaña por la reelección para reunirse con Suu Kyi, aunque la Casa Blanca no lo ha comentado. El representante Joe Crowley, un defensor de larga data de los derechos humanos en Birmania y uno de los promotores de la iniciativa de honrar a Suu Kyi en el Congreso, dijo que los legisladores estaban “extremadamente” emocionados por su visita. “En muchos sentidos, es la culminación de un esfuerzo en el que hemos participado desde hace algún tiempo”, señaló Crowley a la AFP. El representante indicó, no obstante, que Birmania “no está aún donde nosotros queremos que esté” respecto a la democracia y a los derechos humanos. En medio de una lluvia de malas noticias sobre el Medio Oriente, el gobierno de Obama ha presentado cautelosamente la de Birmania como una historia exitosa. Autoridades estadounidenses abrieron negociaciones con la junta militar que gobierna Birmania en 2009 como parte de las políticas del mandatario demócrata de extender la mano a regímenes no amigables. La última visita de Suu Kyi a Estados Unidos fue antes de que su partido ganara en los comicios de 1990, lo que la condujo al arresto domiciliario. Ella trabajó en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York desde 1969 hasta 1971.