Eider, talento fugado

“Me siento más huilense que rolo”, expresó Eider Orlando Arévalo Truque, el mejor atleta colombiano del momento, al que la pobre dirigencia deportiva del Huila, sin ninguna visión, no le importó que se fuera hacia la capital del país cuando ya descollaba hacia los grandes triunfos. “Me siento más huilense que rolo”, expresó Eider Orlando Arévalo Truque, el mejor atleta colombiano del momento, al que la pobre dirigencia deportiva del Huila, sin ninguna visión, no le importó que se fuera hacia la capital del país cuando ya descollaba hacia los grandes triunfos. El deportista, nacido en Bogotá y desde los dos años criado, educado y entrenado en Pitalito, debió volver a su ciudad natal porque en la de su sangre, la de sus padres, a nadie le pareció importante impulsarlo, darle apoyo, dotarlo de lo mejor para apuntarle a una figura mundial como lo es hoy. A nadie excepto a un gran ser humano, entrenador y visionario hombre: su paisano laboyano Edwar Chilito, quien le forjó casi todo lo que es hoy, desde que a los nueve años lo tomó como su alumno de marcha mientras el pequeño estudiaba en uno de los dos salones de la paupérrima escuela del barrio las Américas en Pitalito. Medalla tras medalla Eider fue forjando su enorme talento, pero cuando ya se perfilaba todo su potencial, ninguna autoridad deportiva local o regional se interesó por su futuro. Sí lo hizo otro grande de la marcha nacional, también de Pitalito, el profesor Fernando Rozo, quien convenció a Chilito de soltar al aventajado alumno y llevarlo a una liga seria como la bogotana. Rozo murió en enero de este año y Eider le ha rendido ya dos honores ganando los campeonatos mundiales juveniles en Rusia y Barcelona. Ayer, en una apretada final, se impuso sobre un ruso en la capital de Cataluña; su mira sigue a Londres, a los Juegos Olímpicos. Aunque allí se medirá a los mejores en una competencia que no ha sido su especialidad, los 20 kilómetros, todo lo que haga será ganancia. Arévalo, sin ninguna duda y de mantener su actual ritmo, será medalla de oro olímpica en Rio de Janeiro 2016. Increíble que todo ese palmarés y esos triunfos hayan sido obtenidos en medio de la pobreza, pidiendo uniformes prestados, con zapatillas deficientes, ocupando una humilde pieza de una tía en Bogotá o mientras estudiaba con hambre en la Normal Nacional de Pitalito. Pero más increíble aún que nadie, excepto Chilito y Rozo, hayan tenido la mínima visión para retenerlo acá, en su tierra, a la que él quiere y de la que se siente orgulloso, dotarlo de lo mejor, arroparlo con comodidades para que pudiera luego cubrir sus medallas mundiales con las banderas del Huila y Laboyos. Eider Orlando Arévalo Truque es otra más de las promesas y talentos fugados de la tierra por la física y ya crónica negligencia, desgreño y apatía que nos carcome en algunos sectores regionales. Contrario a ello, Bogotá lo acogió, lo apoya, le brinda lo mejor y le entrega sus banderas. Nosotros tendremos que consolarnos con contar su historia, sus primeros y trascendentales pasos en las calles y carreteras surhuilenses y aplaudir sus triunfos a la distancia. DESTACADO “Medalla tras medalla Eider fue forjando su enorme talento, pero cuando ya se perfilaba todo su potencial, ninguna autoridad deportiva local o regional se interesó por su futuro”. EDITORIALITO El misterioso desierto La Tatacoa será hoy epicentro del gran Rally Neiva 400 Años, que reunirá a destacadas  tripulaciones de Venezuela, Italia, Perú y Colombia. Un evento importante en un escenario natural, que sigue atrayendo a propios y visitantes.