Por lo menos 110 aldeas sintieron el impacto de los dos temblores n el noroeste de Irán con un elevado número de víctimas y damnificados. Por lo menos 110 aldeas sintieron el impacto de los dos temblores n el noroeste de Irán con un elevado número de víctimas y damnificados. VARZEGHAN, AFP Los equipos de rescate iraníes finalizaron ayer las operaciones de limpieza de los escombros en las localidades devastadas por el doble sismo que dejó al menos 227 muertos y 1.380 heridos en el noroeste de Irán, según un nuevo balance. Los dos sismos de magnitud 6,3 y 6,4 -según el Instituto de Estudios Geológicos estadounidense- tuvieron epicentros en Ahar y Varzeghan. La mayoría de los hombres trabajaban en el campo en el momento de la catástrofe pero las mujeres y los niños se encontraban en casa, por lo que la mayoría de las víctimas son mujeres y niños. Las casas temblaron también en Tabriz, y los vecinos, aterrados, se echaron a la calle. Pero no hubo muertos en esta gran ciudad. Balance “Desgraciadamente hay 227 muertos y 1.380 heridos”, declaró el ministro del Interior, Mostapha Najar, a la televisión estatal. “Los heridos han sido trasladados a los hospitales de Tabriz y de la región”. “Unos 110 pueblos sufrieron daños y esperamos que no aumente el balance de las víctimas”, añadió. Según otro responsable, doce pueblos con casas de ladrillo o de tierra han sido totalmente destruidos por los dos temblores que sacudieron el sábado, con solo diez minutos de diferencia, la región montañosa de Varzeghan, a unos sesenta km al noroeste de Tabriz (noroeste de Irán). Réplicas Otras 80 réplicas de importancia menor han golpeado la región que contabiliza más de 16.000 siniestrados. La zona de la catástrofe cuenta con una población de 128.500 personas, la gran mayoría de las cuales viven en algo más de 530 pueblos, según un responsable local. En el pueblo de Bajé-Baj, con algo más de 400 habitantes,fueron reportados al menos 33 muertos, en su mayoría mujeres y niños. Los cuerpos están agrupados en el exterior. Unas mujeres lloran y se lamentan junto a una veintena de cuerpos de familiares mientras que los hombres recurren las ruinas con aire desesperado. Otros no han tenido la misma suerte. En el pueblo de Mirza Alí Ghandi, Zeynab, una niña de 13 años, dice haber “perdido a su hermanas mayor de 16 años y a su hermano de 8 años”. El ministro del Interior, Mohamad Najar, visitó la zona devastada junto a la ministra de Sanidad y al jefe de la Media Luna “por orden del presidente” Mahmud Ahmadineyad “para evaluar la situación y organizar las operaciones”, según la agencia de prensa Mehr. Los equipos de rescate y los de la Media Luna Roja, procedentes de 14 provincias del país, llegaron al lugar la víspera y distribuyen a la población afectada tiendas de campaña, mantas, ropa, alimentos y agua. Irán está situado sobre fallas geológicas importantes y ha sufrido sismos devastadores a lo largo de su historia. El más importante de los últimos años, en diciembre de 2003, mató a 31.000 personas en Bam (sur), es decir una cuarta parte de la población de la ciudad. Desolación y muerte dejaron los dos sismos en Iran. FOTO AFP