La Nación
‘Destape’ fiscal por sobrecostos en Empresas Públicas de Neiva 1 20 septiembre, 2024
JUDICIAL

‘Destape’ fiscal por sobrecostos en Empresas Públicas de Neiva

El ex gerente de las Empresas Públicas de Neiva y la totalidad de la Unidad de Contratación de la entidad, deberán responder por la compra irregular de tapas de alcantarilla que le generó un grave daño presupuestal. Investigación. El ex gerente de las Empresas Públicas de Neiva y la totalidad de la Unidad de Contratación de la entidad, deberán responder por la compra irregular de tapas de alcantarilla que le generó un grave daño presupuestal. Investigación. Ricardo Areiza LA NACIÓN, Neiva El ex gerente de las Empresas Públicas de Neiva, Andrés Espitia Duque y la totalidad de los miembros de la Unidad de Contratación de la entidad, deberán responder fiscalmente por una escandalosa defraudación derivada de la adquisición de 500 tapas plásticas para alcantarillas, adquiridas irregularmente hace cuatro años, como lo denunció LA NACIÓN oportunamente. El ex funcionario, uno de los cercanos asesores de la anterior administración, deberá cancelar de su propio bolsillo la suma de $142,34 millones de pesos, por el daño patrimonial causado, pero también por la mala calidad de 86 de las 500 tapas adquiridas en un tiempo récord, con sobrecosto, sin especificaciones técnicas, sin estudio previo y con un contratista privilegiado, quien conoció anticipadamente, las reglas del escandaloso negocio. La investigación fue iniciada por el ex contralor de Neiva, Leonel Conta, por una denuncia que formuló el comerciante William Botero Giraldo, quien puso en evidencia la irregular contratación registrada en el 2008, en los primeros seis meses de iniciada la administración. El “caótico proceso contractual”, como lo calificó el organismo de control, concluyó con responsabilidad fiscal por el daño patrimonial causado. Junto con Espitia Gómez responderán solidariamente, el entonces subgerente administrativo y financiero, Jaime Cardozo Vargas; el ex subgerente técnico, Germán Andrés García; el almacenista, Jaime Enrique Galindo García; el jefe jurídico, Juan Manuel Serna: el veedor Fernando Segura Méndez y el inexperto contratista, Ronald Franz Naranjo Barrera, quien figuró sólo como intermediario.  Por esos mismos hechos la Fiscalía adelanta otro proceso penal por el supuesto delito de peculado que adelanta el Juez Cuarto Penal del Circuito. (Ver recuadro arriba). Polémico contrato El enredado proceso comenzó el 4 de junio de 2008, seis meses después de haber iniciado la anterior administración por un requerimiento para remplazar las tapas de alcantarillas de metal robadas en distintas partes de la ciudad. Sólo fueron invitados a cotizar la empresa Dusimcol y el particular Ronald Franz Naranjo Barrera, el único detenido por esta negociación. La tercera firma declinó. Sin embargo este último resultó favorecido por ser la oferta de menor precio: $249.371.000. La diferencia fue de apenas $29.000 frente a la otra propuesta del competidor ($249.342.000). El contrato de compraventa No.006 fue suscrito el 11 de julio de 2008, para suministrar 500 tapas para pozos de inspección en polipropileno, sin especificaciones técnicas, en un plazo de 20 días y pagaderos en dos contados. Curiosamente las especificaciones técnicas fueron planteadas por los oferentes y no, como era lo lógico, por las Empresas Públicas. Ese mismo día el afortunado contratista recibió en un tiempo récord el anticipo equivalente a $124,67 millones con los cuales compró el material. Las 500 tapas fueron entregadas el 11 de agosto de 2008 al almacenista Jaime Enrique Galindo. Ese mismo día el veedor Víctor Fernando Segura le expidió el certificado de cumplimiento y se liquidó el irregular contrato. Contratista escogido Según la investigación, el contratista conoció anticipadamente los parámetros y requisitos de la invitación pública y tuvo un conocimiento preciso y detallado del proceso, mucho antes del requerimiento realizado para la adquisición de las tapas, obteniendo así una ventaja preferente desde el comienzo. Dos meses antes de abrirse el proceso contractual el proponente tenía en su poder una cotización de la empresa fabricante de los bienes que posteriormente vendería a Empresas Públicas. La cotización de la empresa Maderplast fue expedida el 15 de abril de 2008, dos meses y dos días antes de la invitación (17 de junio), curiosamente con las características técnicas y el número de tapas que posteriormente se adquirirían. “Tener información previa tan precisa como la que tenía el señor Ronald Franz Naranjo Barrera, era simplemente un factor de diferencia favorable a sus pretensiones”, expresaron los agentes fiscalizadores. El joven proponente, sin ninguna experiencia ni trayectoria, quien terminó ganándose la invitación, ofertó las 500 tapas imponiendo las especificaciones técnicas y precios con sobrecosto. Actuando como un simple intermediario, compró las tapas en $161,24 millones, vendiéndolas en forma inmediata a EPN a un costo global de $249,34 millones. La compra la realizó el 5 de julio de 2008 y la factura presentada a EPN apareció registrada el 6 de julio del mismo año. Por su intermediación obtuvo una ganancia de $88,10 millones en un solo día. Irregularidades La compra se realizó sin un estudio de precios de mercado, previo al contrato, sin precisar las especificaciones, sin contar A pesar de tener seis meses para realizar los estudios y encontrar los mejores proveedores, a última hora, sólo invitó a tres intermediarios. Curiosamente no invitó a la firma fabricante, a la que habían contactado, como uno de los grandes proveedores del acueducto de Bogotá, como quedó evidenciado en las averiguaciones. Aunque el ex gerente Espitia consideró que era “permitido contratar con distribuidores de las grandes compañías como es el caso de Maderplast”, el organismo de control advirtió que la empresa estaba obligada en virtud del principio de economía a buscar todos los mecanismos necesarios para adquirir sus bienes al menor costo posible”. Un intermediario El contratista, no tenía experiencia, ni tenía bodega abierta o trayectoria en el sector. En su versión libre admitió que esta era la primera venta que casualmente realizaba a Empresas Públicas, que nunca antes había vendido tapas de prolipropileno y que se convirtió en distribuidor de Maderplas con el fin de participación en la cuestionada invitación. “Ellos le ofrecen a uno varias alternativas: por pago anticipado no sé el porcentaje exacto, por pago contra entrega también me dan otro descuento y por ser distribuidor igualmente pero no se los porcentajes de utilidad”, expresó en su versión libre, demostrando su inexperiencia. Otro detalle. El Naranjo registró una certificación de la empresa fechada el 7 de julio de 2008, suscrita por la gente Gloria Esperanza Martínez, donde señala que era “la única persona autorizada para distribuir productos de la línea para acueductos”. Sin embargo, la firma es totalmente diferente a la que registra en otro oficio del 23 de noviembre de 2009, también suscrita por la misma persona. Sobrecostos Demostrada la “conducta gravemente culposa” de ex gerente Andrés Espitia y de los demás integrantes de la Unidad de Contratación, el organismo de control les imputó la responsabilidad fiscal por un sobrecosto por la suma de $88,10 millones de pesos, como daño patrimonial, con una connotación especial, unitaria e integral que exige una solidaridad obligatoria para el resarcimiento del daño ocasionado. La cifra se elevó a $96,03 millones, correspondiente al sobrecosto, actualizada a valor presente, según el Índice de Precios al Consumidor, certificado por el Dane. Pero también responderán solidariamente por la mala calidad de 86 tapas para pozos de inspección adquiridas en el contrato. Las tapas, fueron encontradas en igual número de sitios, donde habían sido reemplazadas por mala calidad y otras se encontraban en mal estado. Este hecho, según los investigadores, “refleja una negligencia constitutiva en falta grave”. Y por varias razones. “Es obvio         que al no incluir desde un comienzo las características técnicas de las tapas de prolipropileno que pretendían adquirir, expusieron a la Empresa a un contrato de compraventa que tampoco definió ese parámetro, quedando la entidad contratante a merced de lo que el contratista ofreciera y entregara”, aseguró uno de los peritos que participó en la investigación. La entidad, carecía de un parámetro técnico para verificar su calidad. “Es una omisión grave a la hora de exigir el cumplimiento del contrato, pues se puede prestar para que los bienes entregados por el contratista no sean iguales a los recursos necesitados en la entidad contratante, con calidades, dimensiones y especificaciones técnicas”, precisó el ingeniero civil, Diego Andrés Reyes, quien realizó el dictamen pericial. Pero adicionalmente, las tapas fueron entregadas sin que fueran sometidas a una “prueba de resistencia”, necesaria para verificar la calidad del bien que estaba adquiriendo. El almacenista se limitó a recibir y cuantificar el número de tapas, pero nada más. En otro proceso, actualmente en investigación, la misma empresa adquirió otras 2.000 tapas, en las mismas condiciones, sólo que eran robadas. Investigados por peculado El ex gerente de las Empresas Públicas de Neiva, Andrés Espitia Duque y el contratista Ronald Franz Naranjo Barrera responden actualmente en un proceso penal por presuntas irregularidades en la adquisición de 500 tapas. El Fiscal 17 Seccional de Neiva los acusó de los delitos de peculado por apropiación, contrato sin cumplimiento de los requisitos legales y falsedad en documento privado. El proceso se encuentra en etapa probatoria en el Juzgado Cuarto Penal del Circuito con funciones de Conocimiento. El fiscal del caso anunció que llevará al juicio a la representante legal Maderplast, quien hizo el contacto telefónico con Ronald Franz “en la relación con las tapas”, dijo del servidor judicial. El contratista es hasta el momento el único capturado. La fecha para el inicio del juicio oral, está por definirse, luego de varias interferencias registradas en desarrollo del proceso. La Procuraduría Provincial de Neiva también adelanta la investigación disciplinaria. ‘Destape’ fiscal por sobrecostos en Empresas Públicas de Neiva 7 20 septiembre, 2024 Andrés Espitia, ex gerente de EPN, responde en un proceso penal por los mismos hechos. Ronald Franz Naranjo, contratista