‘El Plan de guerra no se detendrá’

El ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón advirtió que pese a los posibles diálogos de paz, la ofensiva contra la guerrilla seguirá con mayor intensidad. “Las Farc deben entender que les llegó la hora”, indicó en diálogo con LA NACIÓN. El ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón advirtió que pese a los posibles diálogos de paz, la ofensiva contra la guerrilla seguirá con mayor intensidad. “Las Farc deben entender que les llegó la hora”, indicó en diálogo con LA NACIÓN. Ricardo Areiza LA NACIÓN, Neiva Aunque mantuvo total hermetismo frente a los eventuales diálogos de paz con la guerrilla, el ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón sabe que la confrontación armada seguirá su curso. Y con mayor fortaleza. Por eso a partir del próximo año las Fuerzas Militares tendrá más equipos y más hombres para enfrentar los factores de perturbación en las zonas críticas. El funcionario en diálogo exclusivo con LA NACIÓN examinó el nuevo panorama que asumirán las fuerzas militares en una nueva ofensiva, pese a las posibilidades de una eventual negociación para poner fin al conflicto armado. -¿Están preparadas las Fuerzas Militares para diálogos de paz? Primero, este es un tema exclusivo del Presidente de la República. Los demás estamos para acompañarlo, respaldarlo y seguir sus instrucciones y la política que él defina. Segundo, a estas organizaciones se les ha venido golpeando sistemáticamente. Hoy no son ni la sombra de lo que fueron hace una década. Se les ha venido golpeando, se les ha quitado hombres, recursos, capacidad. Estas organizaciones no entienden que les llegó la hora de salir de sus actividades criminales. No tienen otra opción. -¿La ofensiva no se detendrá? La Fuerza Pública a través de sus planes, con más recursos se fortalecerá a partir del próximo año. El plan de guerra no parará.  La Fuerza Pública contará con 27.000 hombres más; tendrá más sistemas de inteligencia de última generación; contará con 20 helicópteros adicionales; van a llegar al país más aviones de transporte, más lanchas para combatir el narcotráfico en las costas y más equipos de infantería de marina para controlar el narcotráfico en los ríos. Así que esta gente tiene que dimensionar que no solo ha venido siendo golpeada y debilitada, sino que la Fuerza Pública va a ser mucho más fuerte. -¿Esta es una ventaja estratégica para obligarlos a negociar? Este tema le compete al Presidente de la República. No es nuestro tema. Pero las instrucciones son claras: Vamos a perseguir a cualquier organización que realice actividades criminales, terroristas o delictivas. Eso significa que seguiremos manteniendo la guardia arriba, y vamos a mantener la agresividad frente a esas estructuras. En el último año se crearon seis fuerzas de tarea y se activaron tres más en zonas estratégicas, tradicionales refugios de las Farc y del Eln. Y la meta es seguir fortaleciendo a la Fuerza Pública. -¿Qué tan debilitadas están las Farc? Si lo vemos desde una perspectiva histórica, es una organización que probablemente tiene hoy la mitad de todo: la mitad de capacidad, la mitad de recursos, la mitad de las armas que alguna vez tuvo. Estas organizaciones se han venido debilitando. Para no hablar de los últimos seis años, en este gobierno han caído, ‘Jojoy’, ‘Alfonso Cano’, 23 cabecillas de frente, hechos sin precedentes en un periodo tan corto. Al Eln se le han neutralizado seis cabecillas de frente. -¿Qué significa en términos de estructura armada? Este año perdió cuatro frentes, tres columnas móviles, una columna guerrillera y una escuela de entrenamiento. Diez frentes han sido debilitados, dos columnas y una compañía. En lo corrido del año las capturas en las filas de las Farc aumentaron el 63 por ciento y cerca del 20 por ciento los muertos en combate.  Pero adicionalmente se registraron 584 desmovilizados de las Farc, se evitaron 193 acciones terroristas. Decomisamos 45 toneladas de explosivos, doscientas veces más de la que se usó en El Nogal y con las cuales se frenaron numerosas acciones terroristas. -¿Esos golpes explican el repliegue de la columna Teófilo Forero? Sabemos que se ha ido replegando a otras zonas, principalmente por el accionar ofensivo y con resultados, es decir, por las operaciones con resultados y con la presencia como en otras actividades como la labor de los ingenieros militares que trabajan como en la vía Baraya-Colombia. –¿Y las bandas criminales? En las bandas criminales ninguno de los que eran jefes, son ahora jefes, o fueron abatidos o fueron capturados en Colombia o en el exterior, o se entregaron como ocurrió con el tal ‘Comba’ de los ‘Rastrojos’. Otros 2.590 miembros de estas bandas fueron capturados, entre ellos once cabecillas. En narcotráfico incautamos 335 toneladas de cocaína equivalentes a 10.953 millones de dólares. –¿A pesar de los posibles diálogos las operaciones se intensificarán? Es que mientras haya terrorismo en Colombia, mientras haya organizaciones que atenten contra el pueblo colombiano, la Fuerza Pública tiene el deber de perseguirlas, como lo hemos venido haciendo. Actualmente grupos como las Farc regresaron a sus áreas de origen, se visten de civil, ya no confrontan las tropas, usan indiscriminadamente explosivos y se dedican a sembrar minas para frenar el avance de las tropas. –¿Y cuál es el panorama en el Huila? Es indudable que esta zona es distinta a otras regiones, con inmensos retos. Por eso aquí se ha venido golpeando permanentemente al frente 17 y se le sigue debilitando. Ese frente tiene ahora el 50 por ciento de lo que era. Los esfuerzos que se han hecho en Algeciras se han neutralizado y bloqueado muchas de las actividades que realizaban desde hacía bastante tiempo. En el sur también hay unos esfuerzos relevantes y en medio de los retos es una buena noticia: Ahora las percepciones son el hurto, el robo de celulares y ya no están en primer lugar en la agenda las acciones terroristas o los secuestros. –¿Y en las ciudades? Tenemos dos planes: El ‘Plan de Guerra ‘Espada de Honor’ que es un plan para golpear al terrorismo desde otro nivel y el ‘Plan Corazón Verde’, orientado por la Policía, con 16 estrategias para atacar cada una con fines específicos la cadena del crimen, las manifestaciones de delincuencia común que más afectan al país como el microtráfico, la microextorsión, el robo de celulares, la minería ilegal. Ahora entramos a dimensionar la seguridad ciudadana. ¿Cómo se reflejará estos planes para Neiva? El general León Riaño ya lo había anunciado: Vamos a colocar 150 policías más a partir de diciembre; en noviembre activamos el Fuerte de Carabineros en San Agustín y en junio de 2013 activaremos la Policía Metropolitana en Neiva que implica no sólo tener un buen comando, una buena estructura, sino, que llegan 500 hombres en ese momento para fortalecer Neiva y sus alrededores. -¿Y las inversiones están garantizadas? Se invertirán cerca de mil millones de pesos en vehículos y motos por parte del presupuesto de la Nación de la Policía nacional y cerca de siete mil millones de pesos en infraestructura y una será el Fuerte de Carabineros en San Agustín, en el mes de noviembre será inaugurado. -¿Por qué el conflicto se ha concentrado en el sur del país? Por los corredores del narcotráfico. La verdad es que los mueve el narcotráfico rampante, por eso tratan de buscar las fronteras o la Costa. De ahí que uno puede deducir esa concentración que se da en esas zonas en particular. -¿Cómo van los diálogos con los indígenas? Ese es un tema del Ministerio del Interior, no del Ministerio de Defensa. El Ministro ha hecho una gran labor, el Presidente de la República estuvo allá, personalmente; se instalaron unas mesas de trabajo y en ellas ha participado el Ministerio de Defensa. Esas son comunidades que respetamos, queremos que entiendan que el deber de la Fuerza Pública es defenderlas de esas organizaciones ilegales que se han infiltrado, moviendo el narcotráfico y, por eso, hemos tenido que intervenir, no para afectar su autonomía ni su herencia cultural, sino al contrario de protegerlas de esa influencia. -¿Pero seguirán allá? La Fuerza Pública tiene que cumplir con su deber, y el deber sagrado es estar en todo el territorio nacional y perseguir, a como de lugar, quienes atentan contra el pueblo colombiano. El ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón, durante la visita exclusiva a LA NACIÓN. FOTO ÓSCAR ROLDÁN