Por tercera vez el presidente de Venezuela fue reelegido ayer con el 54,42% de los votos, frente al líder opositor Henrique Capriles Radonski, quien obtuvo el 44,97%. Por tercera vez el presidente de Venezuela fue reelegido ayer con el 54,42% de los votos, frente al líder opositor Henrique Capriles Radonski, quien obtuvo el 44,97%. LA NACIÓN, AFP El presidente de Venezuela Hugo Chávez superó ayer su mayor reto electoral para hacer
perdurar su régimen y recuperó su imagen de invencibilidad debilitada por un cáncer, al obtener su cuarto mandato para gobernar al país con las mayores reservas petroleras del planeta. Chávez, líder indiscutible de Venezuela desde que asumió el poder en 1999, se impuso con 54,4% de los votos al ex gobernador Henrique Capriles Radonski, quien había capitalizado el desgaste del chavismo y movilizado a la oposición. El teniente coronel retirado de 58 años, que siempre ha crecido ante la adversidad, hizo una campaña limitada en cuanto a mitines, incluso con ausencias intermitentes al principio, pero logró mantenerse a la cabeza de la gran mayoría de encuestas. Ayer domingo, más de 7,4 millones de venezolanos volvieron a votar por él, contra 6,1 millones que lo hicieron por su contrincante, ex gobernador del estado Miranda. Chávez ha luchado por dejar atrás la incertidumbre suscitada por un cáncer del que nunca reveló su ubicación ni gravedad. Aseguró haberse curado el pasado julio, un año después de que le fuera diagnosticada la enfermedad, pero también alertó de que ya no sería el presidente hiperactivo y omnipresente de antaño. Dejó de hacer los ‘Aló Presidente’ -los larguísimos espacios televisivos dominicales- y redujo su ritmo de actividades y compromisos internacionales. A la vez, acentuó su fe en Dios, a quien ha elevado plegarias públicas por su salud: “No me lleves todavía”, rogó en abril de este año. Pero esta aparente fragilidad no ha opacado al líder impetuoso, osado y provocador que tan bien conocen los venezolanos desde que en 1992 lideró un fallido golpe de Estado contra un desgastado sistema bipartidista. La intentona le llevó a la cárcel pero le dio a conocer y en 1998 ganó por primera vez las elecciones. Cuarto mandato Desde entonces fue reelegido en 2000, después de que fuera aprobada la nueva Constitución por él impulsada, y en 2006, cuando arrolló a su rival Manuel Rosales con el 62% de los votos, tras haber superado un golpe de Estado en su contra (2002) y un extenso paro petrolero (2003). Seis años después, perdura su conexión con las clases populares, su base electoral, y las muchedumbres respondieron con entusiasmo en sus mitines, en los que derrochó energía, desgañitándose por momentos como una estrella de rock. Chávez había pedido el triunfo para hacer “irreversible” su régimen socialista y pisar el acelerador del Estado comunal, algo que sus detractores ven como una nueva maniobra para concentrar un mayor poder en sus manos. Ya es comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, a las que ha declarado “chavistas”, presidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), mayoritario en la Asamblea Nacional, y ejerce un control absoluto sobre los medios de comunicación del Estado. Se arrogó poderes para gobernar por decreto durante 18 meses hasta junio pasado, lo que le permitió entre otras cosas aumentar sin límites la deuda pública. Sin sucesor Jamás y pese a la enfermedad, Chávez ha dejado entrever un posible sucesor. Ajeno a quienes le llaman déspota, tirano o populista, se considera protagonista de una segunda independencia de Venezuela, cuya riqueza petrolera le permite financiar millonarios programas sociales dirigidos a las clases populares, que el domingo volvieron a darle su apoyo. También le ha permitido forjarse un liderazgo en América Latina y el Caribe, vendiendo petróleo en condiciones preferenciales a países sin recursos energéticos y brindando pingües negocios a sus aliados. Lideró la oposición a Washington en la región y se convirtió en el gran defensor y sustento de Cuba. Irreverente Con su estilo irreverente, no tuvo reparos en “mandar al carajo” el ALCA, un acuerdo regional de libre comercio con Estados Unidos (2005), o en declarar al año siguiente sentir en el podio de la Asamblea General de la ONU un olor a “azufre” tras el paso la víspera del entonces presidente George W. Bush. Sin embargo, Chávez ha sido lo suficientemente pragmático para seguir enviando a Estados Unidos un millón de barriles diarios de petróleo. Hijo de dos maestros de educación primaria y criado por su abuela paterna, Chávez creció en la localidad de Sabaneta (estado Barinas, oeste). Se ha casado y divorciado dos veces, y tiene cuatro hijos, dos mujeres y un varón del primer matrimonio, y una niña, del segundo, y tres nietos. Pido respeto: Capriles El candidato presidencial de la oposición venezolana, Henrique Capriles Radonski, felicitó al mandatario Hugo Chávez por su reelección a la vez que aseguró que seguirá trabajando y que no va “a dejar a casi la mitad del país solo”. “Quiero felicitar al candidato, al presidente de la República, quiero mandarle nuestra felicitación y ojalá que lea con grandeza la expresión de nuestro pueblo el día de hoy”, dijo Capriles en una rueda de prensa momentos después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) diera los resultados oficiales. “Aquí el que no logró la victoria fui yo, aquí el pueblo no se sienta derrotado, aquí el pueblo contribuyó a abrir un camino y ese camino está allí (…) yo también estoy en ese camino, yo no voy a dejar a casi la mitad del país solo”, añadió el líder opositor. “Otra opción tuvo más votos que nosotros y así es la democracia. Yo he logrado la confianza de millones de venezolanos, seguiré trabajando para ese camino que quieren los venezolanos (…) Más de seis millones pensamos que las cosas pudieran estar mucho mejor”, agregó el líder opositor, de 40 años. “Yo pido a quien hoy se mantiene en el poder, respeto, consideración a casi la mitad del país, que no está de acuerdo con el gobierno”, finalizó Capriles.