Primero debo expresar que Jorge Fernando Perdomo no me ha pedido que lo defienda ante la inmensa inconformidad, que como bola de nieve empezó a crecer por todo el Huila Primero debo expresar que Jorge Fernando Perdomo no me ha pedido que lo defienda ante la inmensa inconformidad, que como bola de nieve empezó a crecer por todo el Huila, especialmente en las huestes conservadoras, a partir de la abdicación como candidato por esa colectividad a la Gobernación. No creo ser infidente al revelar que Perdomo tuvo a bien anticiparnos su determinación en reunión con el ex parlamentario “Tito” García y yo, decisión que acogimos sin reserva alguna. Además, porque la representación política por mandato popular la tienen los legisladores y no la persona que recibe un aval con el fin de ser ungido. Para que no se diga que el asunto es personal contra alguien y su familia, como suelen quejarse algunos de estos, recurrimos al pluralismo para manifestar que el único responsable que el Partido Conservador no tenga candidato propio es el grupo del andradismo, que después de empezadas las encuestas durante los pasados comicios, inició su desbandada hacia la aspirante que aparecía favorita, voltereta que se fue aumentando en la medida en que concluía el debate eleccionario, y que apenas pasado el día de las votaciones, su cabeza principal ni siquiera esperó a que amaneciera para adherir incondicionalmente a la candidata ganadora, a sabiendas de las consecuencias que hoy afronta el departamento. Alguien en los círculos sociales recordaba que es su costumbre acomodarse rápido al mandatario electo para usufructuar las prebendas sin importarle el estilo de su gobierno. Presentada nuevamente la oportunidad para llegar a la Gobernación, Jorge Fernando volvía a contar con el respaldo de Integración Conservadora, las simpatías de gran parte del Partido de la U, y de los Verdes, que ya lo habían acompañado en la anterior confrontación. Solo faltaba el apoyo del andradismo, que prefirió la opción roja a la azul. Luego la oportunidad de ganar era grande, siempre y cuando el respaldo conservador fuera, no solo total, sino fervoroso. De ahí la insistencia de lanzar otro aspirante, y de no concretarse promover el voto en blanco. Lamentable, pues, la situación del Conservatismo. Desde cuando Álvaro Gómez Hurtado aspiró a la Presidencia de la República, no tiene candidato de su seno, y para rematar el Huila que ha sido históricamente de mayorías azules, tampoco tiene ahora para la Gobernación. Inédito y antológico. ¡De verdad, increíble! SENTIDAS CONDOLECIAS Reciba el amigo Carlos Mauricio Iriarte, su familia y allegados, mis expresiones de duelo por el fallecimiento de su padre y pariente Carlos J. Iriarte. Cuando fue presidente de la Asamblea Departamental fui Director de Anales de la corporación. También fui su amigo. Paz en su tumba.