Paralizado, obligado a utilizar una silla de ruedas y a comunicarse mediante un ordenador, Hawking, quien hoy cumple 70 años, continúa trabajando incansablemente para desvelar los misterios del universo. Paralizado, obligado a utilizar una silla de ruedas y a comunicarse mediante un ordenador, Hawking, quien hoy cumple 70 años, continúa trabajando incansablemente para desvelar los misterios del universo. LONDRES (AFP) – Cuando le diagnosticaron su enfermedad neurodegenerativa hace casi medio siglo le dieron pocos años de vida, pero Stephen Hawking, uno de los científicos más famosos del mundo, se dispone a celebrar hoy domingo su 70 cumpleaños, desafiando toda adversidad. Paralizado, obligado a utilizar una silla de ruedas y a comunicarse mediante un ordenador, Hawking continúa trabajando incansablemente para desvelar los misterios del universo y hacer accesibles a un público lo más amplio posible los complicados conceptos de la física. “La gente a la que se le detecta esta enfermedad”, una forma atípica de esclerosis lateral amiotrófica, “se muere al cabo de unos 14 meses del diagnóstico. Obviamente, Stephen Hawking es excepcional por la cantidad de tiempo que ha vivido con ella”, explicó a la AFP Elaine Gallagher, de la Asociación de enfermedades neurodegenerativas. El propio astrofísico atribuye su celebridad a la dolencia que padece desde los 21 años y que ha mermado progresivamente sus funciones motoras. “La gente está fascinada por el contraste entre mis poderes físicos sumamente limitados y la inmensidad del universo con el que trato”, explica con modestia y humor en su página web el autor de la “Historia del Tiempo” (1988), un libro de divulgación científica del que se han vendido millones de copias en todo el mundo. Su fama es tal que ha hecho apariciones estelares en series de televisión como “Star Trek” o “Los Simpsons”, donde en una discusión en un bar amenaza al torpe padre protagonista, Homero, con “robarle” su curiosa “teoría sobre el universo en forma de donut”. ‘Científico más famoso’ Para el astrónomo real Martin Rees, quien lo conoció cuando ambos cursaban doctorados en la Universidad de Cambridge, Hawking “se ha convertido posiblemente en el científico más famoso del mundo, aclamado por sus investigaciones brillantes, por sus libros superventas y, por encima de todo, por su asombroso triunfo ante la adversidad”. Considera sin embargo que su éxito entre el gran público “no debe eclipsar” las importantes aportaciones de Hawking al mundo de la ciencia pura, en particular en los campos de los agujeros negros, la relatividad y la gravedad. “Indudablemente ha hecho más que cualquiera desde Einstein para mejorar nuestro conocimiento de la gravedad”, afirmó el ex presidente de la Royal Society, una de las instituciones científicas más antiguas y prestigiosas del mundo en la que Hawking fue admitido en 1974, con sólo 32 años. “Su gran “momento Eureka”, en 1974, reveló un profundo e inesperado vínculo entre la gravedad y la teoría cuántica” (la física de lo más pequeño)”, agregó. El estado del universo En el día de su 70 cumpleaños, el Centro de Cosmología Teórica de la Universidad de Cambridge, dirigido por Hawking, ha organizado un acto público para el cual las entradas están agotadas desde hace semanas. Este simposio sobre “El estado del universo” estará precedido por una conferencia en la que científicos de prestigio mundial examinarán la situación actual en materia de agujeros negros, cosmología y física fundamental, ámbitos que han centrado los trabajos de Hawking. El Museo de la Ciencia de Londres ha encargado también para la ocasión una serie de fotografías que celebran la vida y la obra del astrofísico, que el público podrá descubrir a partir del 20 de enero. Nacido en la localidad inglesa de Oxford el 8 de enero de 1942, en el tricentenario de la muerte de Galileo, Hawking siempre creyó que la ciencia era su destino y, aconsejado por los médicos, concentró todas sus energías en el estudio de la cosmología. “Cuando Stephen ya no pudo hacer uso de sus manos y manipular ecuaciones en papel, lo compensó entrenándose a manipular formas y topologías complejas en su mente a gran velocidad. Esa capacidad le permitió encontrar soluciones a difíciles problemas físicos que nadie más podía resolver, y probablemente él mismo no hubiera sido capaz de hacerlo sin esa nueva habilidad”, dijo el físico teórico estadounidense Kip Thorne, unos de sus colaboradores habituales. El enigma, las mujeres Durante su larga carrera, Hawking recibió innumerables reconocimientos y ocupó durante 30 años la Catedra Lucasiana de Matemáticas de Cambridge, tres siglos después del “padre” de la gravedad Isaac Newton. En su vida privada, Hawking ha estado casado dos veces y tiene tres hijos. Pero más allá de sus trabajos científicos, ha confesado que el enigma que no ha logrado desentrañar todavía son “las mujeres”. “Son un misterio total”, dijo a la revista New Scientist. ‘Hawking continúa trabajando incansablemente para desvelar los misterios del universo y hacer accesibles a un público lo más amplio posible los complicados conceptos de la física’.