Casi toda la red de vías de la capital huilense cumplió su vida útil. Por cada ‘remiendo’, surgen huecos nuevos. Al deterioro grave y cada vez más progresivo Casi toda la red de vías de la capital huilense cumplió su vida útil. Por cada ‘remiendo’, surgen huecos nuevos. Al deterioro grave y cada vez más progresivo, la administración municipal anuncia que espera al menos poner freno con un plan agresivo de recuperación. Rafael Trujillo LA NACIÓN, NEIVA Dicen los conductores -de transporte público o particular- que no hay una sola vía en Neiva que se salve de los huecos. “Esto está ‘picho’ ”, dice Jorge, el conductor de un colectivo a quien acompaño en la uno, en el norte de la ciudad, una de las comunas con más deterioro de sus calles. Entre urbanas y rurales, Neiva tiene mil kilómetros de vías, 680 de los cuales son urbanas. De esta cifra, 480 kilómetros están pavimentados, según el secretario de Vías e Infraestructura de Neiva, Carlos Libardo Gómez Ramírez. Sin embargo, esa estadística es relativa. Todo aquel que haya transitado por la ciudad ha visto y sabe que son pocas las vías que se encuentran en condiciones óptimas, que las repavimentaciones y reparcheos se pierden entre las grietas y los huecos que “brotan” luego de algunos aguaceros, y que el deterioro parece ir más rápido que la recuperación que emprenden, regular e intermitentemente, sucesivos gobiernos locales. Hay vías pavimentadas que no lo parecen, dado su abandono; pavimentos que son rotos para instalar redes de alcantarillado, y hasta las calles que son cementadas experimentan daños críticos por el paso masivo de vehículos cuando se cierran otras vías. El caso es que, en su mayoría, la red vial de Neiva colapsa a diario, porque buena parte cumplió su vida útil, reconoce el secretario de Vías e Infraestructura, Carlos Libardo Gómez. Como en muchos otros asuntos, las decisiones sobre la conservación vial han respondido hasta ahora a situaciones de emergencia y no de prevención, o no hay recursos suficientes para atender el mantenimiento. Este año, solo hasta cuando se hizo una adición de recursos, en febrero, mediante acuerdo presentado al Concejo, fue posible disponer de recursos para contratar personal que permitan ejecutar las obras de recuperación. Sin prevención La falta de prevención es una de las condiciones más críticas. Para el ingeniero José Antonio Soto, “economizar en gastos de conservación podría ser tan peligroso como, a nivel personal, economizar en medicinas”. Pero, incluso, a nivel de trabajos de conservación, hay un fenómeno frecuente que ocurre como consecuencia de la rehabilitación de una vía: antes de su recuperación, las calles adyacentes sufren el incremento de una movilidad para la cual probablemente no están diseñadas. Y cuando la calle o carrera se recupera, esta experimenta un crecimiento considerable en el tránsito de vehículos, livianos y pesados. La consecuencia de todo esto es que una vía cualquiera en cuestión, diseñada para un tráfico determinado, se ve de pronto sobrecargada por un aumento de vehículos pesados para el que no estaba diseñada, por lo que termina deteriorándose. 70 mil metros cuadrados El año pasado, la Alcaldía de Neiva emprendió un plan de recuperación vial, que los neivanos pudieron notar en diferentes sitios de la ciudad. De acuerdo con la Secretaría de Vías e Infraestructura, fueron atendidos 70 mil metros cuadrados. La cifra permitió priorizar algunos de los ejes viales de mayor importancia en la movilidad de la ciudad. Sin embargo, puede resultar insuficiente, en el mar de huecos y remiendos de reparcheos pasados en muchas de las mismas vías. Por eso, el gobierno local anuncia el que debería de convertirse en el más amplio plan de recuperación de vías en Neiva. Se trata de un programa que debe de atender las vías de mayor importancia en la ciudad, que quedarán incorporadas al Sistema Estratégico de Transporte Público, Setp. El Sistema prevé agilizar el transporte público, con vías amplias y señalizadas, un servicio amable y eficiente con óptimas rutas, asegurando el control efectivo de la operación y facilitando la movilidad de la ciudad. Reparación a gran escala De acuerdo con la Secretaría de Vías, se emprenderá en breve (probablemente en mayo próximo) un plan de recuperación de trayectos a gran escala. Estas intervenciones buscan reparar los pavimentos con más que pequeños reparcheos. El primer tramo arrancará en la avenida Alberto Galindo, tomará la carrera 16 y llegará hasta la salida al corregimiento El Caguán. El segundo, partirá de la confluencia o cruce de la avenida Galindo con carrera 16, donde se convierte en avenida 26, para tomar la carrera séptima y llegar hasta Los Arrayanes. Toda la carrera segunda, desde la confluencia de las comunas uno y nueve, actualmente a un paso de pavimentación, hasta llegar a Surabastos, será un tercer tramo. También será intervenida toda la avenida Tenerife, desde la avenida de circunvalación hasta la Novena Brigada, y luego, la calle 19 desde su inicio junto a la pista de patinaje hasta la carrera 52. Similar trabajo se hará en la calle 8, y las avenidas de circunvalación y de La Toma. En las comunas En cada comuna habrá también procesos específicos de reparcheo y recuperación, según dijo a LA NACIÓN el secretario de Vías. Son en:
- Comuna 1: calles 43 y 45 entre carreras primera y segunda, y carrera 6 W
- Comuna 2: carreras sexta y séptima (barrio Las Granjas), y recebo en vías de Villa Marinela, El Pinal y Granjas Comunitarias.
- Comuna 3: vías de Chapinero, Tenerife y Quirinal.
- Comuna 4: Los Mártires, micro centro, carrera 8 entre calles segunda y quinta, y accesos a la estación del ferrocarril (calle 7 entre 14 y 15).
- Comuna 5: rutas de colectivos
- Comuna 6: rutas a los barrios Santa Isabel, inmediaciones del colegio Oliverio Lara, frente a la institución educativa Limonar, y la 39 sur entre 19 y 22.
- Comuna 7: rutas a barrio Gaitán y en Calixto Leyva
- Comuna 8: rutas a Acacias, Los Alpes, Ventilador, Las Américas y San Martín
- Comuna 9: rutas de transporte público
- Comuna 10: cambio de alcantarillado para reparar en la vía en la calle 21 entre carreras 52 y 59, y recebo en el sector de Media Luna.
Mientras todas estas obras se ejecutan, para lo que, en algunos casos habrá que aguardar varios meses, el deterioro vial seguirá su camino. Una situación que para el ciudadano de Neiva, que tiene que pagar sobretasa a la gasolina (y que se paga desde el 29 de diciembre de 1998) resulta inexplicable. El cruce de la calle 45 con carrera primera F es una de las zonas más críticas en el norte de Neiva. Incluso, el hueco, que abarca todo el ancho de la vía, está “señalizado”. Algunas calles adyacentes han sido cerradas por la comunidad. Los conductores deben de hacer múltiples piruetas con sus vehículos para evadir eventuales daños. Distintas facetas de un mismo problema Deterioro: barrio Limonar Dos importantes rutas del sector, en el sur de Neiva, están prácticamente inservibles. La de la derecha, la calle 39 sur, que es ruta de colectivos, resulta intransitable hasta para peatones. Algunos vecinos han “rellenado” los huecos con desechos de construcción. Daños en pavimento Junto a pavimentos recientes, un enorme parche se convierte en un verdadero peligro en la vía que conduce a barrios del sur, como Canaima. Los daños de este tipo obligan a reducir la marcha de los vehículos y son un riego para quienes no lo advierten oportunamente. Abandono Carrera tercera, en su confluencia hacia la avenida Tenerife. Es un tramo pavimentado, pero es tal su deterioro, que parece más una vía destapada. Los huecos y el polvo son su característica predominante… bueno, cuando no ha llovido. (Otras fotos) 6 En el norte de la ciudad, la carrera segunda tiene una importante continuidad en barrios de la comuna uno y nueve. La vía está lista para ser pavimentada. 7 Así sueñan los neivanos tener sus vías. Pavimentado, no reparchado, y con plena señalización, este tramo de la avenida La Toma entre carreras quinta y sexta da una idea de cómo deberíamos de tener las vías en Neiva.