Con quemaduras de segundo grado en la mano izquierda ingresó ayer a la clínica Medilaser un niño de 8 años, a quien su mamá sorprendió sustrayéndole de la cartera 5.000 pesos y decidió aplicarle un brutal castigo. LA NACIÓN, NEIVA Con quemaduras de segundo grado en la mano izquierda ingresó ayer a la clínica Medilaser un niño de 8 años, a quien su mamá sorprendió sustrayéndole de la cartera 5.000 pesos y decidió aplicarle un brutal castigo. La Policía de Infancia y Adolescencia asumió el caso y posteriormente recibió la denuncia para darle el correspondiente trámite ante la Fiscalía. La abuela materna del niño, identificada como Gloria Edith, fue quien al ver la gravedad de las heridas decidió trasladarlo hasta el centro clínico. La señora manifestó que los hechos sucedieron el pasado jueves 28 de marzo a las 10:00 p.m. en el barrio Nuevo Milenio, en la residencia donde el niño vive con su madre Lina Marcela, quien al parecer arrastró al niño hasta la estufa y le quemó las manos hasta ampollárselas de manera severa. La vecina avisó Una vecina se dio cuenta también de lo sucedido y fue quien le narró a la abuela lo que había sucedido la noche anterior. A esta hora el menor permanece hospitalizado dada la gravedad de las lesiones y hoy será intervenido quirúrgicamente en la mano, en donde mediante cirugía plástica se espera que no quede afectado de por vida. Por el momento el niño se encuentra bajo la custodia y responsabilidad de su abuela, mientras es dado de alta para luego ser dejado a disposición del Instituto de Bienestar Familiar.