El semanario Le Canard Enchainé informó este miércoles que la justicia francesa decidió dar un paso en la lucha contra el dopaje tecnológico y se investigará el uso de bicicletas con motor en el Tour de Francia.
Sin citar ciclistas o equipos, el semanario destacó que el dopaje mecánico podría afectar a equipos profesionales.
Serán los magistrados Claire Thépaut y Serge Tournaire quienes se encargarán de esta investigación. Los jueces creen que existe una clase de “pacto de corrupción internacional”que podría haber beneficiado a grandes corredores.
Cabe destacar que el dopaje tecnológico se ha convertido en una gran sombra alrededor del ciclismo mundial. El año anterior la Unión Ciclista Internacional descubrió el primer caso de motores en las bicicletas en los Mundiales de Ciclocross de Zolder, cuando hallaron un mecanismo motorizado en la bicicleta de Femke Van den Driessche. La belga fue sancionada por seis años.
Desde el 2010 la UCI realiza exámenes en las bicicletas de los corredores profesionales antes de las pruebas World Tour y con tabletas detectan la presencia de mecanismos ocultos.