Conmoción y un profundo pesar sintió toda la comunidad de la ciudad de Florencia al conocer sobre la muerte el día de ayer de Manuel Julio López García, mejor conocido como “Don Manuel”, quien tenía una reconocida droguería en el centro de la ciudad.
OLE, CAQUETÁ
Manuel Julio López García falleció ayer sábado sobre las 10 de la mañana dejando un gran vacío entre sus familiares y demás personas que le conocieron. Este hombre quien era apreciado por muchos por ser el medico del pueblo, permaneció por 10 días internado en una clínica de la capital del país, sin embargo no logró ganarle la batalla a su afectación de salud y una falla cardiaca terminó arrebatándole la vida a los 71 años de edad.
Gran parte de la vida de este hombre la dedicó a curar y recetar a sus pacientes quienes llegaban con diferentes dolencias, sin embargo los pobladores decían que él tenía manos milagrosas, pues los medicaba y los alentaba. Por eso era buscado por todo el pueblo.
Don Manuel, como era conocido, además de su sabiduría era un hombre bondadoso, por cuanto en ocasiones lo consultaba gente de escasos recursos, económicos, pero esto a él no le importaba y los atendía con su gran corazón.
Desde hace 10 días este hombre de gran nobleza venía presentando una falla cardíaca, la cual se complicó el sábado en horas de la mañana.
De Manuel Julio López García, se conoció que era el segundo de 16 hermanos, que era natural de Aránzazu, Caldas y había nacido en el año 1946.
Dedicó gran parte de su vida a trabajar en droguería, llegó a los 14 años desplazado por la violencia de la época hasta la ciudad de Florencia, desde ese entonces encontró que su gran pasión era la droguería, por lo que a sus 27 años, junto a su hermano Horacio dieron apertura en los municipios de El Paujil y El Doncello a este negocio, el cual fue creciendo día a día por sus acertadas medicaciones.
Años después ‘el Médico del Pueblo’ inauguró en la capital caqueteña la droguería llamada ‘la Moderna’ ubicada en pleno centro, la cual hoy en día goza de gran reconocimiento.
Tras conocerse de su fallecimiento, las redes sociales colapsaron con mensajes de dirigentes, comerciantes, empresarios y ciudadanos, del común, quienes recordaron al propietario de la droguería Moderna como el “médico del pueblo”.
“Otra pasión de este gran hombre eran las motos, le gustaban también los caballos, era un hombre caritativo, honesto, servicial, ayudaba a todo mundo. El mejor padre del mundo y su vida eran sus cuatro nietos: David y Juan Miguel Vaca López, Joan Manuel y Martin Santiago López Figueroa”, expresó la su hija Jhoana López Márquez.