Germán Palomo García
El último informe sobre la competitividad departamental publicado por el Consejo Privado de Competitividad, CNC, y La Universidad del Rosario muestra un retroceso del Huila de dos puestos en la clasificación general (pasó del puesto 14 al 16 que ya había ocupado en el 2014, es decir, retrocedió tres años) pero reporta también algunas posiciones que parecen increíbles. En el pilar “Instituciones”, El Huila es el primer departamento en “desempeño administrativo” porque cumple con eficacia, requisitos legales, capacidad administrativa y gestión pero es el departamento número 21 en “Gestión Fiscal” porque tiene baja autonomía fiscal (puesto 17) y una capacidad local de recaudo igualmente baja (puesto 20). Esto quiere decir que aún no se ha encontrado la renta sustituta de las regalías, algo que genera preocupación a futuro. Además, es el departamento número 12 en “transparencia en el uso de las regalías” corroborado reciente informe de Planeación Nacional.
En seguridad y justicia el Huila ocupó el puesto 8 entre los departamentos; ¿saben por qué? Porque el Huila ocupó el primer puesto en tasa de secuestro (menos secuestros: ¿Producto del Acuerdo de La Habana?) aunque el puesto 24 en tasa de extorsión; es decir, pesa más que no haya secuestro que tengamos una alta extorsión, que afecta la seguridad e impide atraer inversión foránea. Destacable el segundo puesto en sostenibilidad ambiental a pesar de ser el departamento No.13 en superficie cubierta por bosque.
En infraestructura, el Huila ocupó el primer lugar en “Servicios Públicos” a pesar de ser el número 14 en cobertura de acueducto y el 16 en cobertura de energía eléctrica. Esto porque en “Costo de Energía Eléctrica” es el primer departamento del país por tener el menor costo. Entonces, ¿en qué queda la tradicional queja de que pagamos los costos de energía más altos del país?” O será que al CNC habría que aplicarle el interrogante de ¿”A dónde merca el DANE? En conectividad, otro componente de infraestructura ocupamos el puesto 17, pero en “costo de transporte terrestre a puerto” somos el departamento No.20 por obvias razones. Si no utilizamos transporte aéreo difícilmente seremos importantes exportadores a menos que encontremos un producto que “aguante” un alto costo de flete. Por lo demás, (Educación Superior, sofisticación y diversificación y dinámica empresarial) no hay sorpresas. Estamos más cerca de la cola y seguimos tranquilos.