Coincidieron dos de los medios de comunicación más importantes del país en abordar los detalles de las investigaciones alrededor del execrable asesinato de la proba funcionaria de la Dian, Celia Escobar en Neiva. De un lado, El Tiempo revela que a la sacrificada servidora le habían ofrecido un soborno de $28 millones a cambio de no indagar a empresarios y exportadores de tilapia por acciones irregulares, que incluirían un gigantesco lavado de activos, y que uno de los indagados la mandó asesinar. Y señalan, sin nombre propio, a un sujeto que invierte en proyectos extravagantes, al estilo del capo Pablo Escobar, que es contratista público y, a la vez, está siendo investigado como un presunto lavador de activos de la columna “Teófilo Forero” de las Farc. Según El Tiempo, la Fiscalía cree que, mediante uno de sus publicitados proyectos, el empresario en cuestión le ha blanqueado dinero del narcotráfico a la guerrilla.
Y a su vez, el columnista más leído de la revista Semana, Daniel Coronell, habla de que “varias cosas extrañas están sucediendo en Huila”, luego de hacer un detallado recuento del proyecto “Huilafrica” que construye el señor Germán Garrido Osorio entre Neiva y Palermo, quien se presenta como ingeniero de petróleos de la Universidad Surcolombiana. Según Coronell, que titula su columna “Nace una estrella”, el negocio principal de Garrido “parece ser una escuela de capacitación para técnicos de la industria petrolera llamada Ecapetrol. Una actividad que –al parecer– le permite a su dueño pagar el considerable costo de sus excentricidades”. Y detalla que “el singular emprendimiento está creciendo en Palermo, Huila, a 18 kilómetros de Neiva, la tierra de Rodrigo Lara Bonilla, quien ofrendó su vida tratando de cerrarle el paso al dueño de otro zoológico construido con similar estética”.
Cierra su columna Coronell recordando el asesinato de Celia Escobar y su probable relación con investigaciones acerca de fraudes con el IVA, lavado de activos y el sorprendente crecimiento de las exportaciones de tilapia en algunos criaderos de la zona, los mismos hechos a los que se refiere El Tiempo.
¿Tiene que ver lo que revela la Unidad Investigativa de El Tiempo con lo que detalla Coronell? ¿Es coincidencia o no que el diario capitalino hable de un sujeto que invierte en proyectos extravagantes, al estilo del capo Pablo Escobar, investigado como un presunto lavador de activos de la columna “Teófilo Forero” de las Farc, y el columnista nos cuente los detalles de “Huilafrica” y su dueño Germán Garrido, y ambos enfoquen sus textos hacia el asesinato de la funcionaria Escobar?
Son publicaciones serias, con elementos fuertes, de muchísima gravedad. Y cabe a los organismos de control e investigación la alta responsabilidad de indagar a fondo todos esos detalles y contarle al país la verdad de lo que ha pasado en torno al homicidio de la funcionaria. Y el señor Garrido, en ejercicio de su legítima defensa, sabrá cómo contestar estas preguntas directas y aclarar su papel en estos episodios de nivel criminal. Lo que se ha dicho es demasiado grave.
“¿Tiene que ver lo que revela la Unidad Investigativa de El Tiempo con lo que detalla Coronell?
Editorialito
El revolcón en el sector agropecuario anunciado por el recién posesionado ministro de Agricultura, Francisco Estupiñán Heredia, es un enorme desafío. Sus retos, un gran censo agropecuario, una reforma catastral y estímulos a la agricultura constituyen sin duda, otra mirada de trascendental impacto en el nuevo enfoque de ruralidad.
