Familiares de los tres huilenses asesinados en Tame (Arauca), habían denunciado su presunto secuestro. Un supuesto guerrillero del Eln les habría exigido 200 millones de pesos por su liberación y la entrega de una camioneta. Familiares de los tres huilenses asesinados en Tame (Arauca), habían denunciado su presunto secuestro. Un supuesto guerrillero del Eln les habría exigido 200 millones de pesos por su liberación y la entrega de una camioneta. Ayer fue sepultado Rodrigo Losada Rodríguez. Los cuerpos de Carlos Augusto Calderón Pinto y Carmen Rosa Gutiérrez Sandoval, llegan hoy a Campoalegre. RAFAEL RODRÍGUEZ C. LA NACIÓN, NEIVA Doscientos millones de pesos habrían sido exigidos al parecer por el Ejército de Liberación Nacional (Eln) a los familiares de los tres huilenses, Rodrigo Losada Rodríguez, Carlos Augusto Calderón Pinto y Carmen Rosa Gutiérrez Sandoval, asesinados en Arauca. El supuesto plagio y la millonaria exigencia fueron puestos en conocimiento de las autoridades policiales y judiciales en Neiva por familiares de las víctimas, luego de recibir una llamada al parecer de un miembro del grupo guerrillero. “Un ciudadano se acercó a las instalaciones del Gaula Neiva, a dar un reporte sobre un posible secuestro de estas personas… en donde realizaban la exigencia de 200 millones de pesos por la liberación… captores se identificaron como pertenecientes al grupo subversivo del Eln”, dijo el Comando de la Policía en Arauca. Agregó que la exigencia económica además de ser por la liberación de las tres personas, también era por la devolución de la camioneta Dimax de color blanco y placa SWV-899 sin más datos. Fuentes de la Policía en el Huila manifestaron que un familiar de Losada Rodríguez, Calderón Pinto y Gutiérrez Sandoval, llegó al Gaula de la Policía a informar lo sucedido. “Se le dio la asesoría y se le acompañó a la URI de la Fiscalía donde instauró el denuncio por extorsión y hurto”. Los tres huilenses aparecieron muertos a orilla de la carretera de la vereda Corocito en el municipio de Tame. El primero de los cuerpos encontrados fue el de Losada Rodríguez, el martes 21 de febrero a la 1:30 p.m. “Presenta ocho impactos por arma de fuego en diferentes partes del cuerpo”, dijo la Policía. Los cuerpos de Calderón Pinto y Gutiérrez Sandoval fueron hallados en el mismo sector por habitantes de la vereda. “Presentan múltiples heridas de proyectil por arma de fuego en tórax, espalda y rostro”, señaló el organismo de seguridad. Una semana de ausencia y de comunicación de las tres personas con sus familias en el Huila, originó que Fabián Lozada Rodríguez, hermano de Rodrigo, viaje a Tame a saber por la suerte de ellos, encontrándose primero con la muerte de su allegado. “Estuvimos averiguando por ellos, el hermano de Rodrigo viajó a buscarlos, lo llamé el miércoles y me contó que el hermano había aparecido muerto, que estaba en la morgue de Tame”, manifestó Lucila Gutiérrez Sandoval, hermana de Carmen Rosa. La mujer se volvió a comunicar con Lozada Rodríguez, quien le informó que la pareja había sido asesinada. “Que estaban en la morgue”. ‘Fueron a trabajar y encontraron la muerte’ El grupo de huilenses salió del municipio de Campoalegre y Rivera con la ilusión de mejorar sus condiciones económicas, a través del trabajo en una petrolera en la región de los Llanos Orientales. Rodrigo y Carlos Augusto laboraban como conductores, mientras que Carmen Rosa trabajaba en el casino de la compañía. “El marido (Carlos Augusto) ya se había ido, le consiguió un trabajo en una petrolera en el casino”, manifestó Lucila Sandoval, hermana de la hoy occisa. El hermano de Rodrigo, manifestó a la Policía en Tame que su allegado se desplazaba hasta la ciudad de Villavicencio a recoger un vehículo y llevarlo al municipio de Arauca, “para iniciar labores en una empresa petrolera”. Allegados de la mujer recordaron que su sueño era ahorrar dinero para invertir en la casa donde vivía con sus tres hijos y la mamá, María del Carmen Sandoval, ubicada en el barrio Sincelejo en la Capital Arrocera del Huila. “Ella tenía ilusiones de arreglar la casa, ampliar las piezas para los niños… se fue con ilusiones de trabajar para conseguir dinero”, recordó Lucila. Ayer se cumplieron las exequias de Rodrigo Lozada en el municipio de Rivera, mientras que hoy son esperados los cuerpos de Carlos Augusto y Carmen Rosa en el centro poblado de Río Frío (Rivera) y el municipio de Campoalegre respectivamente, por sus familiares. Fotos: Óscar Roldán Carlos Augusto Calderón Pinto