"No puede habilitarse a los servidores públicos para deliberar y promocionar acerca de los acuerdos que se hayan realizado en la Habana, es decir, esto es una participación en política. No puede este proyecto de ley estatutaria establecerlo (el proyecto de ley sobre el plebiscito) sin que medie una ley estatutaria que permita a los servidores públicos hacerlo", afirmó Castañeda.
De este modo, los funcionarios que promuevan los acuerdos podrían verse expuestos a eventuales procesos disciplinarios por participar en política.
No confundirse con faltas disciplinarias
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, manifestó en nombre del Gobierno que el concepto de la Procuraduría que advierte que funcionarios públicos que promuevan los acuerdos de paz estarían incurriendo en política lo reciben con respeto y acatamiento.
El jefe de la Cartera Política afirmó que el deber de todos los colombianos es promover la paz y que esto no se puede considerar como participación en política, pues la campaña del plebiscito no ha arrancado.
“El afán de buscar la paz por parte del Gobierno Nacional no puede confundirse con faltas disciplinarias. No hay campaña del plebiscito y si no podemos hablar de paz, entonces de qué vamos a hablar en este país en guerra después de 60 años”, indicó.
Cristo agregó que será la Ley que está en revisión en la Corte Constitucional la que reglamente el papel de los funcionarios públicos en este tema y que, mientras tanto, seguirán impulsando una salida negociada al conflicto.
“La campaña para el plebiscito solo arrancará cuando el Presidente de la República convoque al plebiscito y la regulación de la participación en política se dará según el fallo de la Corte Constitucional, luego esperaremos el fallo de la Corte Constitucional”, explicó.
El ministro añadió que, mientras tanto, “obviamente todos los funcionarios públicos en Colombia, no solamente tenemos el derecho, sino el deber y la obligación de promover la paz, la concordia, la solución negociada al conflicto armado”.
Cristo concluyó que no cree que las visitas a Cuba de funcionarios traigan alguna repercusión en términos disciplinarios.
Juan Fernando Cristo, ministro del Interior.
