La Nación
COLUMNISTAS

FALTA VISION PARA EL POSCONFLICTO

Algunas de las zonas con mayores potencialidades para el desarrollo económico y el progreso social de los departamentos del Huila y Caquetá, están en la cordillera oriental, en la región limítrofe de los dos departamentos, pero han sido precisamente estos los lugares donde con mayor crudeza se ha dado la confrontación armada entre el estado y la guerrilla de las FARC, impidiendo una adecuada explotación de sus riquezas. Me refiero a lugares como Balsillas, en las cabeceras del municipio de Neiva, a Santana Ramos, distante 90 kilómetros del casco urbano de Algeciras y San Guillermo, al oriente de Garzón. Estas subregiones con climas entre 14º.C. y 18º.C, abundantes aguas, suelos con alta capa orgánica y de inclinación moderada, con excelentes pasturas donde la capacidad de carga promedio es de 3 reses por hectárea, tienen excepcionales potencialidades para la producción ganadera, cárnica y láctea, cafés de alta calidad y piscicultura de trucha, uno de los peces de agua dulce más apetecidos en todo el mundo. Estos tres renglones agroindustriales fueron priorizados en la agenda de productividad y competitividad del departamento del Huila, actualizada el año anterior como Plan de Competitividad e Innovación del departamento.

¿Que se requiere para el desarrollo económico, social y cultural de estas zonas? Primero, y lo más importante, que lleguen a feliz culminación las negociaciones de paz en La Habana, pues la guerra es la principal enemiga del progreso. Segundo, adecuados procesos de planeación y prospectiva para el despegue socioeconómico en el período llamado “postconflicto”. La plata, que es importante para financiar las inversiones, se conseguirá más fácil si existen planes, programas y proyectos bien estructurados. Sería muy malo que los planes de desarrollo actualmente en construcción, de los departamentos del Huila y Caquetá, así como de los municipios de Neiva, Algeciras, Garzón, Florencia, Puerto Rico y San Vicente del Caguán, no incluyeran esta perspectiva. Los planes prospectivos debe incluir la adecuación y pavimentación de las vías nacionales hacia estas zonas, el arreglo de las vías terciarias, la conectividad a través de las Tics, la organización empresarial de los productores rurales, el estímulo a la inversión de capitales regionales, nacionales e internacionales, el desarrollo de agroindustrias para generar valor agregado a la producción primaria, el desarrollo de infraestructura en salud y educación, la vinculación de toda la población a los sistemas de seguridad social, así como garantizar en un tiempo prudencial (¿20 años?) una cobertura total en básica primaria y secundaria y en la media. De esta manera, las zonas que fueron cuna del conflicto armado en el Surcolombiano, podrán transformarse en los mejores clústers cárnicos, lácteos, cafeteros y piscícolas de la región.