El evento, organizado por LA NACIÓN con el concurso de la Alcaldía de Neiva, la Gobernación del Huila así como otros municipios y empresas, será una oportunidad para que los huilenses se acerquen y conozcan más del proceso de paz.
Jorge Andrés Géchem, asesor para el Posconflicto, de la Alcaldía de Neiva, señala que se trata de una oportunidad para aclarar muchas dudas sobre el tema pero también para que el gobierno nacional se lleve el mensaje de que hay un departamento que debe ser tenido en cuenta en esta etapa que se avecina.
“También queremos ir más allá, y analizar los retos y desafíos del posconflicto en el Huila, así como aprovechar la oportunidad para escuchar de primera mano a personas como Mitrotti y Pardo sobre lo que se viene”, explica.
El evento
El Foro estará dividido en tres partes. El primero ha sido llamado el empoderamiento de la administración pública con el fin de que se entienda el rol que desempeñará este sector en la etapa del posconflicto. Luego vienen los empresarios y la reintegración, y por último las víctimas.
Para Géchem, una ciudad como Neiva tiene que ser tenida en cuenta para la etapa del posconflicto por hacer parte de una de las regiones, al igual que el resto del Huila como una de las más afectadas por el conflicto.
“Según el registro único de víctimas, en Neiva se tienen alrededor de 82.000 víctimas. Neiva es ciudad expulsora y receptora de víctimas, en materia social, económica y de desarrollo ha sido afectada por esta violencia”, dijo.
Ante esta situación, señaló Géchem Neiva se dispone a prepararse para lo que se viene con el posconflicto cuya oportunidad debe ser aprovechada para crecer como región.
La iniciativa
Para ello, se ha creado un programa llamado: la razón es la paz preparémonos para el posconflicto mediante el cual se han definido algunas acciones que como administración municipal se pondrán en marcha en pro de la construcción de una paz real y duradera en la ciudad.
A partir de ahí, Gechem señala que el posconflicto debe llevar al país a una mayor inclusión y más oportunidades de convivencia. Pero también a un mejor desarrollo y calidad de vida.
En tal sentido, se ha definido dos ejes en ese programa. El primero tiene que ver con el fortalecimiento institucional donde se tendrá en cuenta los ajustes, cambios y reformas necesarias al interior de la administración municipal para entender los desafíos del posconflicto.
Asimismo, un segundo componente tiene que ver con la creación de una política pública municipal para el posconflicto en Neiva que deberá servir como una hoja de ruta. Esto, con el fin de que facilite la articulación que requiere del compromiso de todos.
“Esa política pública también nos da un espacio para que la ciudadanía pueda expresarse, aportar, contribuir con el camino de la construcción y consolidación de un territorio en paz y mejor convivencia. También queremos avanzar en la creación de una dependencia exclusiva para el posconflicto que haga una coordinación institucional y facilite una mayor articulación a nivel departamental, nacional e internacional en todas las estrategias”, precisa Jorge Andrés Géchem, asesor para el posconflicto de la Alcaldía de Neiva”.
Luego vendrían unas estrategias encaminada a la paz y la convivencia que incluye componentes como el de oportunidades para la paz para cubrir el goce de derechos culturales, económicos y ambientales.
Asimismo, oportunidades académicas, y formación. También avances en la generación de ingresos para las familias y alternativas así como el fortalecimiento de proyectos de emprendimiento y productivos.
Más allá
Y por supuesto, se busca garantizar el derecho a la seguridad de los ciudadanos y una presencia integral de Estado en todo el territorio, pero especialmente en lugares donde han estado tradicionalmente asentadas las Farc.
“Al desmovilizarse, antes de que lleguen los desmovilizados de las Farc, o las bandas criminales, debe llegar antes el Estado, en su integridad, no solo con la Policía y el Ejército, sino con las oportunidades, ofertas e inversión a estos territorios históricamente olvidados”, señala Géchem.
Pero de la mano con la inversión y el respeto de los derechos, el funcionario agrega que debe haber también un acceso a la justicia, y el fortalecimiento de las organizaciones sociales y comunitarias para el tratamiento de conflictos.
En ese sentido, agrega que habrá que trabajar de la mano con las juntas de acción comunal, las administradoras locales y la ciudadanía en general de la ciudad.
De la mano de todo esto, tendrá que ir la participación ciudadana, de acuerdo con la estrategia para la paz, diseñada por la Alcaldía de Neiva, pues se entiende que no funcionará si no hay compromiso de la gente.
“A los ciudadanos no solo hay que exigirles, sino que también hay que abrirles los espacios para que puedan participar, opinar, se sientan parte y se involucren en todo el proceso de construcción de paz en la ciudad. Luego vendrá la promoción, prevención y garantía de los derechos humanos, lo mismo que el Derecho Internacional
Humanitario”, puntualiza el funcionario.
Quizá la más importante de las estrategias, según Géchem, será la de la pedagogía y cultura para la paz. Es decir, que la comunidad conozca qué es realmente el proceso de paz, qué fue lo que se acordó, qué negoció y qué implicaciones tiene sobre la comunidad.
Además, tiene que conocer cómo la paz beneficiará a las regiones así como entender los retos y los desafíos del posconflicto y el rol que deberá desempeñar, si se quiere avanzar hacia una ciudad pacífica y mejor convivencia.
“Nada sacamos si se firman todos los procesos de paz, si se reintegran todos los grupos armados al margen de la ley, si en nuestros barrios y calles, seguimos matándonos por una mala convivencia o intolerancia. Por eso queremos avanzar hacia una nueva cultura de mejor convivencia, del respeto por los derechos, por la persona y la diferencia. Que entendamos que puede haber diferencias de todo tipo pero que todos hacemos parte de un mismo territorio y que para que un territorio sea mejor, se necesita el compromiso y el esfuerzo de todos los ciudadanos”, concluye Géchem.