¿Preocupado por las consecuencias del manejo de estos cada vez más populares equipos? Ya llegó uno diseñado para evitar los obstáculos.
Los drones, pequeños vehículos capaces de volar y de ser manejados a distancia, no solo tienen un creciente uso en todo el mundo por la cantidad de aplicaciones (desde fotografía y vídeo hasta estrategias militares), sino que, en algunos casos, se están convirtiendo en un problema de seguridad.
Por ello, hay cada vez medidas más estrictas en cuanto a su uso. Pero ahora, DJI, el mayor fabricante de drones en el mundo, dio un nuevo paso con la presentación de su modelo de alta gama, Phantom 4.
El aparato es capaz de superar obstáculos e, incluso, seguir a su operador de una manera automática.
Este modelo incorpora un Sistema Anticolisión, que permite sortear diferentes obstáculos durante el vuelo. Mediante una serie de sensores de ultrasonido incorporados, que actúan a modo de ojos, este dron tiene la habilidad de ver en tres dimensiones y reaccionar ante un imprevisto.
Este mecanismo hará que, en caso de “ver” un obstáculo acercándose se frenará para evitar la colisión. Desde el dispositivo de control utilizado por el operador se avisará, mediante alertas visuales y sonoras, de la información relevante. La tecnología integrada Lightbridge permitirá consultar el entorno desde una pantalla con resolución 720 p HD y en una distancia máxima de 5 kilómetros.
Además, cuenta con ActiveTracker, una innovadora función añadida que permite al Phantom 4 seguir los pasos de una persona para grabarlo a vista de pájaro de manera automática, es decir, sin la necesidad de manejar el dispositivo manualmente, lo que tiene importantes posibilidades en el campo de la grabación deportiva.
El nuevo diseño es capaz, a su vez, de minimizar el zarandeo en situaciones de viento fuerte y posibles ráfagas desde cualquier ángulo, bajo la promesa de mantener sus movimientos de una manera más precisa que sus predecesores.
Además de alcanzar velocidades de 72 kilómetros por hora (el modelo anterior llegaba a 48 kilómetros hora), el dron es capaz también de regresar a la zona de partida, a una especie de “casa”, para evitar pérdidas.