Dos noticias marcaron la más reciente junta directiva de Biorgánicos del Sur, encargada de la disposición final de los residuos sólidos de los nueve municipios de esta región del departamento. La primera, es que, sorpresivamente, fue nombrado remplazo del gerente, Jesús Felipe Grazt. En su lugar fue designada la administradora de empresas, Edna Yolima Calderón, la única hoja de vida presentada.
Y la segunda, es que el cambio se produjo justo cuando la empresa empezó a consolidar una rentabilidad. Por cuarto año consecutivo Biorgánicos entregó dividendos, con unas importantes mejorías en el componente ambiental.
Mientras la disposición final de basuras y deshechos está convertido en un dolor de cabeza para la mayoría de las poblaciones del país, Biorgánicos del Sur, que atiende a Pitalito, Palestina, Oporapa, Timaná, Acevedo, San Agustín, Isnos, Saladoblaco y Elías, parece ser la excepción, al haber logrado superar las dificultades del pasado, concentradas en pérdidas económicas, caos ambiental y cierres permanentes por las autoridades ambientales.
Es una de las pocas plantas en donde no sólo ‘entierran’ los residuos, sino que la mayor parte se transforma en abono o en nuevos productos.
Y es que en casi veinte años de fundada no había sido posible consolidar resultados positivos por inconvenientes financieros, técnicos, tecnológicos, administrativos y ambientales.
Hoy, la crisis parece cosa del pasado. Fueron optimizadas las instalaciones de la planta, con inversiones que superan los $1.000 millones, recursos gestionados con el Banco Mundial, el Ministerio de Ambiente y la Gobernación del Huila, a través de Aguas del Huila.
Avances administrativos y financieros
De la mano de Grazt, Biorgánicos se puso al día en los compromisos administrativos que recaen sobre una empresa que recibe a diario toneladas de desperdicios, con la implementación del Manual de Contratación, el Modelo Estándar de Control Interno, MECI, y las normas internas financieras, NIF.
Desde el año 2012, cuando el administrador público asumió la gerencia de la entidad, comenzó a generar rentabilidad, “que en el 2015 superó los 100 millones de pesos”.
En el componente ambiental, Grazt reconoció que el aporte de los alcaldes salientes resultó significativo para el buen desarrollo de la gestión, así como el esfuerzo de las comunidades surhuilenses, “que realizan un juicioso ejercicio de selección en la fuente, que permite aprovechar más del 50 por ciento de los residuos que son llevados a Biorgánicos, y ampliar la vida útil de la celda de disposición final, que paso de 5 a 11 años de durabilidad”.
En Biorgánicos del Sur se disponen dos mil toneladas de basura mensuales.
La planta de tratamiento de lixiviados ya fue construida. La infraestructura entrará en servicio en las próximas semanas, con una inversión de $1.000 millones de pesos, que terminará con el eterno problema de Biorgánicos, la contaminación por lixiviados. “Con la nueva obra solucionamos de raíz ese dificultad”, dijo Grazt.
También se consiguió avanzar en el estudio del pasivo ambiental, que determinó las acciones y proyectos a seguir, para darle el manejo adecuado a 75 mil toneladas de basuras acumuladas desde hace más de diez años.
En Biorgánicos del Sur, instalaciones situadas a ocho kilómetros de Pitalito, en la vereda Llano Grande, se disponen dos mil toneladas mensuales, 48% de las cuales corresponde a orgánicos, que se transforman en compost, un mejorador de suelos, con certificación del ICA, que se comercializa en la región.
El plástico, el cartón y otros elementos se venden para labores de reciclaje. “En el último año, la empresa tuvo ingresos cercanos a los 200 millones de pesos, por venta de compost y reciclaje”, aseguró Grazt.
Adicionalmente, la empresa es rentable social y ambientalmente. Es una de las pocas plantas en donde no sólo ‘entierran’ los residuos, sino que la mayor parte se transforma en abono o en nuevos productos a partir del reciclaje, y no llegan a la celda.
“La celda fue construida para un periodo de duración de cinco años; hoy la vida se extendió a 11 años. “Creo que es la única parte del país en donde se está haciendo este proceso. Incluso, la Superintendencia le hace seguimiento a esta experiencia”, dijo.
A pesar de los permanentes desafíos ambientales en este tipo de iniciativas, Grazt aseguró que se han realizado ajustes necesarios a los requerimientos.
“Nos ha tocado duro, porque las exigencias que nos hicieron fueron muchas, pero agradecemos a la Cam, a la Procuraduría Ambiental, porque ellos también nos han conducido a cumplir con la normas ambientales y mejorar el funcionamiento de la planta”, señaló.
Y agregó que de Biorgánicos continúa por el mismo camino, seguirá siendo una empresa productiva y de rentabilidad ambiental y social.
Biorgánicos en reestructuración
Desde el periodo en que entró en reestructuración, la sociedad ha mantenido deudas que llegaron a sumar $2.050 millones. El 31 de diciembre pasado, cerró operaciones con una deuda de $620 millones de pesos, “esperando que en el 2020 o antes pueda finalizar los pagos periódicos, pactados al acogerse a la Ley 550 o de Intervención Económica.
Al término de la vigencia 2015 también finalizaron los compromisos económicos adquiridos con Empitalito, empresa a la que compró un lote de terreno, en donde funciona la actual celda de disposición final, cuyo pagó se consiguió en los recientes cuatro años.
El Gerente de Biorgánicos destacó que es muy importante en adelante proyectar la compra de maquinaria para la planta y operar, debido a que la mayor parte cumplió la vida útil. “Son elementos vitales para la operatividad de la empresa y el normal procesamiento de los residuos, así como para el adecuado manejo de la celda de disposición final”.
El informe sobre el estado de la empresa fue entregado el pasado jueves a los alcaldes de la zona sur del Huila, quienes conforman la junta directiva de la entidad. Y para el 30 de marzo está prevista la asamblea general de socios.