En medio del rechazo y repudio fue sepultado en el municipio de Algeciras el comerciante Julián Ernesto Sánchez Polanía, acribillado a quemarropa en un bar en la ciudad de Leticia (Amazonas).
Con una serenata de mariachis y voces pidiendo justicia, sus familiares y amigos le dieron ayer a las 4:00 p.m. el último adiós al hombre, quien salió de su tierra natal en busca de nuevas oportunidades económicas.
Sánchez Polanía, hijo del líder cívico Eulises Sánchez Bernal y Jaidy Polanía Losada, fue asesinado cuando se encontraba departiendo con amigos en un bar en la Avenida Internacional cerca de Inravisión, el pasado viernes a las 10:30 p.m.
El hombre, de 33 años de edad, recibió 10 disparos a quemarropa de parte del sicario que ingresó al bar, mientras su cómplice lo esperaba afuera a bordo de la motocicleta en la que huyeron.
Las primeras hipótesis de las autoridades apuntan a que se trató de un ajuste de cuentas.
Sánchez había sido capturado en desarrollo de la operación ‘Éufrates’ de la Vigésima Sexta Brigada del Ejército en la ciudad de Leticia, el pasado 12 de enero de 2013.
Las autoridades militares manifestaron que el hombre junto con siete personas más, integrarían la banda transnacional ‘Los Mellos’, de narcotraficantes que delinquían en zona fronteriza entre el Brasil, Perú y Colombia.