Dos viejos de avanzada

En las sociedades latinoamericanas, y particularmente en Colombia, donde ser viejo es un pecado, dos líderes cercanos a los 80 años tienen muy sorprendidos a todos en nuestra Región. Se trata del nuevo Pontífice de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, y del presidente de Uruguay, José Mujica.
En contraste, Colombia ha vivido un amplio período de su historia reciente con presidentes muy jóvenes, en sus 40s, y por ello, hoy sobrevive con ellos como ex presidentes, todavía mucho más jóvenes que esos "viejos" tan revolucionarios. Cuatro de ellos están en sus 60s: Gaviria, Samper, Pastrana y Uribe. Llenos de vida, de ideas y de poder, no siempre bien manejado.
En muy poco tiempo, el Papa Francisco ha dado señales de su estilo, y en lo único que todavía muchos tenemos la esperanza de que también se aparte de la tradición de la Iglesia, aún tema pendiente, es en la visión sobre el papel de la mujer en la sociedad. La iglesia no puede seguir siendo tan retardataria. Los primeros indicios no son buenos, pero aun se tienen esperanzas. Su austeridad, su sencillez, su respeto por la comunidad LGBT, abre un abismo entre el pasado reciente y lo que se prevé como el futuro del catolicismo. Además, el manejo del dinero, que siempre ha sido un misterio, es un campo en el cual el Papa Francisco entró pisando duro. Se ha llamado el Papa de los pobres y no parece ser solo retórica.

Con respecto al Presidente Mujica, su mentalidad joven, su coherencia ideológica, su agudeza para entender el mundo de hoy, es objeto de análisis permanente. A su lado nuestros presidentes todavía jóvenes y nuestros ex presidentes, parecen viejos del siglo pasado. Convertir a su país en un laboratorio controlado, para mostrar otra forma de atacar el problema de las drogas, es un riesgo que ninguno de nuestros jóvenes mandatarios se ha atrevido a plantear. El aborto, tema en el cual en Colombia estamos metidos en la misoginia, del Procurador para abajo, el presidente José Mujica se ha manifestado como partidario, avanzando al nivel de países que le reconocen a la mujer el derecho sobre su cuerpo y dejan la decisión a nivel individual, de acuerdo con los principios de cada una. Como debe ser.
Una lección interesante: la juventud no es garantía de buen gobierno ni la vejez de retroceso. Lo que importa es la capacidad de unos y otros de conectarse con el país que gobiernan en el momento en que gobiernan, de entenderlo, de romper con las horribles mañas políticas que los ayudaron a llegar al poder.
De no comerse el cuento de que por ser Presidentes son infalibles, y sobre todo, de tener clara su labor como ex presidentes actuantes. En otros países, quien ha ejercido el poder entiende que le debe a la sociedad el haberle permitido llegar a esa posición, y que de ahí en adelante, su labor no es destruir sino ayudar a construir.
Hoy en día, hasta los papas se retiran cuando consideran que les llegó el momento, pero en Colombia, algunos ex presidentes no se dan cuenta que dejaron de serlo o quieren continuar su dinastía con sus hijos, y quien paga la cuenta, es la democracia colombiana.
 

Néstor Lorenzo, en el ranking de los mejores entrenadores del 2024

El técnico de la selección Colombia, Néstor Lorenzo, quedó en el ranking de los mejores entrenadores del año 2024....

Cinco quemados con pólvora en la noche de Navidad

Cinco quemados con pólvora empañaron la celebración de Navidad en el departamento del Huila. Pese a ello, las autoridades...

Presencia de Colombia en posesión de Nicolás Maduro desata rechazo

El viceministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Jorge Rojas Rodríguez confirmó que el Gobierno sí tendrá representación en el...

Síguenos en:

Artículo Relacionado

Historia navideña

Durante siglos, antes del cristianismo los romanos adoraban docenas de dioses protectores de sus vidas. Saturno era el de la...

El mejor regalo

Es usual que durante estas épocas cedamos ante el frenesí consumista y terminemos olvidando que el mejor regalo...

Llegó la 18

Una final soñada para mí era Once Caldas vs Atlético Nacional, campeón: Once Caldas. La razón, un acto...

Cien años de soledad en Netflix

Por allá en el año 2002 leí los cien años de soledad que relata Gabo y, no, no...