El presidente de Bolivia, Evo Morales, elogió los resultados de la nacionalización de los hidrocarburos, que en siete años de vigor dejó ingresos por 19.000 millones de dólares, seis veces más que los generados en el quinquenio precedente.
Según Morales, la nacionalización de los hidrocarburos "ha hecho cambiar la economía nacional" y ahora apuesta por "la industrialización de los recursos naturales".
La estatización de los hidrocarburos, en mayo de 2006, es la obra estrella de su gobierno, que luego dio paso a sucesivas nacionalizaciones de la minería, las telecomunicaciones, la electricidad, la aeronavegación, etc.
En los últimos siete años, esa medida, criticada y elogiada por igual, generó en el sector de hidrocarburos ingresos por 19.000 millones de dólares, comparados con los 3.300 millones del quinquenio precedente a esa medida, en 2006, según informó este martes el gobierno.
"En el periodo 2006-2013 se tiene un acumulado de 19.534 millones de dólares" de ingresos por regalías, impuestos y otros, frente a los 3.333 millones registrados entre los años 2000 y 2005, detalló en un informe el viceministro de Exploración y Explotación de Hidrocarburos, Eduardo Alarcón.
En un acto público en Tarija (sur), Evo Morales afirmó que la nacionalización tuvo, además de un efecto económico, otro político y "más importante, (pues) no nos hemos sometido a la imposición del Fondo Monetario Internacional", que hasta entonces regía con diversas recetas la vida nacional.
En 2006, el poder Ejecutivo nacionalizó la riqueza hidrocarburífera, en manos de una docena de compañías privadas extranjeras como la española Repsol, la brasileña Petrobras, la argentina PanAmerican y la británica British Petroleum, que tiempo después se adecuaron a las nuevas normas locales.
Morales ajustó los términos contractuales de 82% en favor del estado boliviano y 18% para las empresas, un guarismo inverso al que regía hasta entonces.
Con esa nueva fórmula los ingresos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) crecieron de 300 millones en 2005 a 3.000 millones de dólares en 2012.
De haber sido una empresa residual hasta 2006, con un patrimonio de 1,1 millones de dólares, YPFB quintuplicó también su patrimonio hasta 5.450 millones, según un informe de la empresa estatal entregado a la AFP.
Además, Alarcón mencionó el crecimiento de las reservas probadas de gas natural de 9,94 TCF (trillones de pies cúbicos) en 2009 a 11,2 TCF, dato que está sin embargo sujeto a certificación internacional.
Según el analista económico independiente, Marco Gandarillas, no todo lo que reluce es oro, pues "la nacionalización nos debería haber generado mayor independencia (hidrocarburífera), y pasa lo contrario". "Tenemos enormes importaciones de derivados de petróleo, diesel, gas licuado y gasolina", advirtió el analista, aunque en el futuro próximo la apertura de dos plantas procesadoras de combustible podría revertir esa situación.
Lejos de las voces que anunciaban el fracaso de esas medidas y que ahuyentarían el capital extranjero, el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, dio un espaldarazo este mes a Morales al destacar el crecimiento de la economía boliviana en los últimos años, desde la llegada del gobernante indígena al poder en 2006.
"La economía de Bolivia era entorno a los 8 mil millones de dólares, hoy la economía boliviana es de 32 mil millones de dólares, en 8 años se multiplicó por 4 el tamaño de esta economía", afirmó Moreno la semana pasada en La Paz. También destacó que el BID facilitó este año créditos por 400 millones de dólares para diferentes obras civiles.