Diego Omar Pérez Escamilla es un auxiliar de enfermería huilense, quien desde hace dos años estaría suplantando la identidad de un enfermero neivano y ejerciendo en varios municipios del Huila. Mientras las autoridades no tomen medidas, el falso profesional seguirá laborando en el departamento.
Lucía Sánchez
Un verdadero drama vive desde hace unos meses el enfermero neivano Diego Omar Pérez Campos de 23 años de edad. El dolor de cabeza del joven profesional empezó tras enterarse, que un auxiliar de enfermería está suplantado su identidad personal y profesional.
El implicado responde al nombre de Diego Omar García Escamilla, de aproximadamente 40 años de edad oriundo del municipio de El Pital. El hombre, auxiliar de enfermería, habría falsificado una cédula de ciudadanía y una tarjeta profesional con datos personales del enfermero neivano, así como también, plagiado la hoja de vida del joven.
Lo más grave del caso, es que el falso enfermero, con la destacada hoja de vida del profesional neivano ha ejercido en varios municipios del Huila.
“En septiembre del año pasado descubrí que un hombre estaba suplantando mi identidad, con el fin de ejercer mi profesión y cobrar más dinero. Casualmente el señor implicado se llama Diego Omar, igual que yo, pero los apellidos son García Escamilla, y según conocí él solo es auxiliar de enfermería”, relató el enfermero que ejerce su profesión desde hace dos años.
Según narró el profesional que actualmente labora en la clínica Coven en Neiva, se enteró de la suplantación cuando el señor García Escamilla laboraba en un centro médico del municipio de Acevedo, y desde entonces emprendió una cruzada para que el hombre sea judicializado.
El enfermero neivano, además aseguró, que logró establecer con otros colegas, que el falso profesional lleva dos años suplantándolo y ejerciendo en varios municipios del sur del Huila, entre estos, Acevedo y El Pital.
“En cualquier error que este señor cometa, el que va a estar implicado soy yo, porque él está trabajando a mí nombre, con mi hoja de vida completa. Esta situación también me afecta en el tema de declaración de renta, ya que todas las empresas en las que él ha trabajado han facturado a mí nombre, esto es una pesadilla”, manifestó con preocupación”, el enfermero.
Reciente suplantación
Nidia Bermeo Anturi, es la representante legal de la agremiación sindical Proactiva de Pitalito, la cual es integrada por profesionales de la salud y en septiembre de 2019 contrató al señor Diego Omar García Escamilla, para laborar como enfermero jefe en San Adolfo Acevedo, desconociendo que el hombre solo era auxiliar de enfermería y estaba suplantado la identidad de un verdadero profesional.
Al ser consultada por LA NACIÓN, Bermeo Anturi contó que el hombre apenas llevaba tres días laborando en la ESE San Francisco Javier y descubrieron de la suplantación por azar.
“Como agremiación sindical estábamos requiriendo personal en enfermería, entonces una jefe de enfermeras nos manifestó que tenía un amigo que nos podía colaborar, y nos mencionó el nombre del joven Diego Omar Pérez Campos, en ese momento yo estaba con la encargada de salud ocupación y ella dijo que esa persona ya estaba trabajando con nosotros en San Adolfo Acevedo”, contó la señora Bermeo.
Según complementó la representante de la agremiación, en ese momento se sembró una duda en la jefe de enfermería y la encargada de salud ocupación, quienes decidieron comparar las fotos de los dos “homónimos”.
“Al ver que no se trataba de la misma persona, la jefe de enfermería que trabaja con nosotros decidió pedirle la hoja de vida a su amigo y colega Diego Omar Pérez Campos y compararla con la del señor que teníamos contratado y laborando en Acevedo, y efectivamente verificamos, que todos los documentos de este hombre y la experiencia laboral, es decir, toda la hoja de vida, menos la foto, era idéntica a la del joven enfermero”, dijo la señora.
Tras observar irregularidades en los documentos entregados por su empleado, y pensar en que posiblemente estaría suplantando a otra persona, Nidia Bermeo Anturi puso al tanto del asunto al abogado que los asesora.
Esta es la cédula falsa del auxiliar de enfermería, Diego Ómar García Escamilla. Solo uno de los documentos plagiados, con los que el hombre suplanta al enfermero neivano, Diego Ómar Pérez Campos.
Denuncia
El 26 de septiembre del 2019, el abogado Óscar Eduardo Castro Romero como asesor jurídico de la agremiación sindical Proactiva, interpuso la denuncia ante la Fiscalía General de La Nación, en el Centro de Servicios Judiciales en Pitalito, correspondiente a falsedad ideológica en documento público, en concurso con falsedad personal, y demás delitos que dentro de la investigación se puedan determinar.
De acuerdo a la representante legal sindical, lo realmente reprochable del caso es que la Fiscalía no estaba dispuesta a recibir la denuncia de parte de la agremiación. “En ese momento empezó el proceso y uno siente impotencia al no ver resultados, sin recordar que este ente ni siquiera quería recibir nuestra demanda, argumentando que no nos habían suplantado como entidad jurídica, sino que habían perjudicado a una persona”.
La mujer agregó, que el abogado se enojó y les dijo que tenían que recibir la denuncia, porque la empresa había recibido información falsa y se legitimaba la defensa de la misma; así fue que en la Fiscalía procedieron a recibir la demanda.
“Este hombre solo llevaba laborando unos días con nosotros, le dijimos que teníamos una reunión en Pitalito, que asistiera, al mismo tiempo citamos al joven enfermero neivano víctima de este caso, y a la Fiscalía; tras la reunión y la presión mía y del abogado, él (impostor) aceptó que solo era auxiliar de enfermería y se fue, pero las autoridades nunca llegaron”, contó la mujer.
Finamente, Nidia Bermeo Anturi aseguró que puso el caso en conocimiento de la Secretaría de Salud Departamental; y también llamó a varios gerentes de centros médicos del Huila para que no fueran a contratar a este hombre. Al hacerlo se llevó la sorpresa, de que el auxiliar de enfermería había laborado como enfermero en Nátaga, Saladoblanco y otros municipios. Asegura que recientemente “lo vieron en San Agustín”.
Por su parte, Claudia Elena Ruiz Jaramillo, secretaria de Salud del Huila dijo que conoce del caso pero que “el joven enfermero Diego Omar Pérez Campos no ha puesto la denuncia formal. Tenemos conocimiento de la situación debido a que él envió todos los documentos a un amigo que labora aquí, esa persona nos ha pasado la información, pero la denuncia no tiene un recibido de la oficina de radicación de documentos, hasta tanto el joven no haga el proceso formal no podemos tomar cartas en el asunto”, explicó.
Lo cierto, es que mientras las autoridades no tomen medidas, el falso enfermero seguirá ejerciendo en el departamento del Huila.
“Se está poniendo en riesgo la vida de la gente”
Lourdes Mateus, quien hace parte de la Junta Directiva de la Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia, seccional Huila, hizo un llamado a las autoridades para que tomen cartas en el asunto, pues asegura, que con este “falso enfermero suelto” está en riesgo la vida de muchas personas.
“Nosotros ya teníamos conocimiento del caso, es una situación que no es nueva y no entendemos por qué los encargados de monitorizar el recurso humano en salud no se han percatado. Este señor tiene la suplantación no solo del registro profesional de enfermería de nuestro colega, sino de la identidad, pues ha trabajado en algunos municipios del Huila”, dijo Mateus.
Agregó que “cómo asociación le hacemos un llamado a los entes de control para que verifiquen que los registros presentados en los puestos de trabajo, estén realmente validados por la Secretaria de Salud Departamental”.
La profesional también explicó la gravedad del caso en materia de salud. “Hay un tema de legalidad y ética del ejercicio profesional de enfermería, si este no está certificado afecta directamente el derecho a la salud de la gente. Por ejemplo, la responsabilidad legal de los profesionales de enfermería tiene un nivel tan alto, que nosotros respondemos por las actuaciones de los auxiliares, en términos de supervisión. Entonces, si una persona no está capacitada, no solamente hay un riesgo en la función que ejerce, sino, en la actividad que desempeña todo el personal que tiene a cargo. Se está poniendo en riesgo la vida de la gente”.
