Un grupo de aserradores del sur del Huila, dedicados toda su vida a la tala ilegal de bosques en Acevedo y Palestina no solo las apagarán sus motosierras sino que las entregarán y se comprometen al cuidado del medio ambiente, a cambio de ser incluidos en proyectos productivos que lidera para su bienestar la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena, CAM.
Y el objetivo final es de mayor alcance: se busca la protección de importantes zonas como el Parque Nacional Cueva de los Guácharos y el Parque Natural Corredor Biológico, amenazados por la deforestación indiscriminada, en los cuales se destaca como la especie más amenazada el exótico Roble Negro. Se trata de 21 aserradores que entregarán a la CAM sus motosierras el próximo 18 de octubre; son campesinos que llevan más de 50 años en este oficio y que han pasado esta labor de generación en generación, por supuesto sin tener la conciencia ni la información pertinente acerca del impacto que generan en estas zonas protegidas, y cuya actividad ha sido más un asunto de supervivencia de ellos y sus familias que de enriquecimiento a costa de la depredación de la naturaleza.
Muy notable trabajo que es el resultado concreto no solo de concientización acerca de los daños causados sino de las mismas acciones y operativos de la CAM y las autoridades policiales que terminaban con el decomiso de miles de metros cúbicos de madera; por ello, hace un par de meses los mismos aserradores buscaron acercamientos y reuniones con los entes oficiales, recibiendo tanto atención como respuesta clara y positiva a sus planteamientos y el diseño de esta propuesta ambiental.
Debe ser noticia de primera plana este acuerdo de campesinos dedicados toda su vida a derribar árboles, accediendo a entregar sus herramientas eléctricas a cambio de formación, ofertas laborales y créditos para la compra de tierras. Y bien vale reseñar las zonas de donde son las mujeres y hombres que hacen parte de esta iniciativa ejemplar para el país, que residen en su mayoría en las veredas Ilusión y Villa Fátima en Acevedo y Mensura, El Roble y Jericó en el municipio de Palestina. Es el componente esencial del desarrollo alternativo, otra forma de enfrentar los fenómenos sin recurrir solo a la represión. Un programa de debe expandirse, como los incentivos forestales, o la consolidación de las reservas naturales de la sociedad civil, dedicadas a la conservación, pero también a la producción sostenibles, ecoturismo, educación ambiental, entre otras actividades.
Enorme debe ser el aplauso que reciban este viernes esos aserradores, que lo serán hasta ese día, para convertirse de verdugos a protectores de las montañas del sur colombiano.
“Un programa de debe expandirse, como los incentivos forestales, o la consolidación de las reservas naturales de la sociedad civil”.
Editorialito
Impulsado por el Ministerio de Comercio, se realiza hoy en San Agustín. “Colombia Prospera con el Huila”, una liderado por la Comisión Regional de Competitividad del Huila y Confecámaras. Otra oportunidad para promover a San Agustín, incentivar y fortalecer el turismo en la región, promover el desarrollo empresarial e impulsar el funcionamiento de los principales atractivos turísticos de esa zona.
