Una nueva inquietud ronda el controvertido proyecto de construcción del Distrito de Riego Tesalia-Paicol. Durante una audiencia pública desarrollada en el municipio de Paicol, el Incoder manifestó que no existen los recursos para el contrato de interventoría de la obra para el año 2014 y que por incumplimiento en los trabajos podría declararse la caducidad en el contrato.
El anuncio se hizo en presencia de los entes de control, mandatarios locales de Paicol y Tesalia, representantes del Consorcio Interriego, encargado de la obra, y funcionarios del Incoder, quienes socializaron con la comunidad los avances que hasta el momento se tienen en el trabajo de construcción del distrito referente a la ejecución y el presupuesto.
Manuel Tovar, director Técnico de Infraestructura del Incoder y supervisor del proyecto del distrito de riego, indicó que “el Incoder asistió a la convocatoria que hicieron los alcaldes en donde se presentó un pormenorizado informe de los interventores en cuanto a la obra y los avances. Tenemos que al día de hoy un avance de 53,4% en cuanto al plan de inversión”, puntualizó Tovar.
Asimismo, el encuentro permitió conocer el pronunciamiento de los entes de control frente a lo que el Incoder realizará un análisis del contrato, buscando establecer multas que en los próximos días se estarán cuantificando para ser aplicadas al constructor por los atrasos de la obra, que en este momento se encuentran en el 28 por ciento.
“Esta revisión nos puede llevar incluso a la declaratoria de la caducidad del contrato”, declaró Tovar, supervisor del proyecto en representación del Incoder.
Sin recursos para la interventoría
De acuerdo con el Incoder, otra de las preocupaciones que surge en torno a la continuidad del proyecto del distrito de riego se centra en no contar con los recursos para el pago de la interventoría del año 2014, debido a recortes financieros del orden nacional.
Se enfatizó que dicho proyecto exigiría que el 31 de diciembre de este año las obras se paralicen y entrar en una etapa de incertidumbre frente a la finalización de la obra.
“La gran preocupación frente al tema de recursos para el pago de la interventoría el próximo año, recursos que oscilan entre los 3.000 millones de pesos, que de no obtenerse obligarían a la suspensión de la obras”, enfatizó Tovar.
Por su parte, el alcalde del municipio de Paicol, Norberto Palomino Ríos, dijo que “al atraso de la obra se suma que la interventoría del próximo año no esté garantizada, ya que nos dicen que no se tiene el recurso para la contratación, tal y como lo manifestó el Incoder, y es ahí donde surge el problema para la comunidad y el Gobierno, de una obra que se le ha inyectado mucho dinero y que no se pueda finalizar”, puntualizó el mandatario.
La tarea viene de ahora en adelante para los alcaldes y congresistas de la región, quienes deben trabajar en la consecución de los recursos que se requieren para poder garantizar el dinero de la interventoría. “Esperamos que el Gobierno del Huila nos ayude con el tema de los recursos, como lo ha hecho siempre”, dijo Manuel Tovar.
La próxima semana se llevará a cabo una reunión en la capital colombiana de los mandatarios de Paicol y Tesalia con la clase parlamentaria, en donde se buscará el apoyo de los congresistas y el Incoder frente al logro de los recursos que garantizarán la interventoría de la obra.
Los avances del distrito
Pudimos conocer que en este momento el valor de la obra se mantiene en los 108.000 millones de pesos, que tienen actas parciales de facturación por 57.000 millones de pesos y que existe un anticipo aún por amortizar de 22.000 millones de pesos aproximadamente.
“Nos preocupa que dentro del balance el consorcio Interriego ha recibido anticipos y pago de obra de 79.000 millones de pesos, faltando sólo 29.000 millones por ser entregados del valor total de los trabajos, y la obra según ellos va en el 53 por ciento, lo que significa que faltaría el 47 por ciento para terminar el proyecto”, afirmó el alcalde de Tesalia, Fernando Antonio Pérez.
Otra de las preocupaciones, luego de la audiencia, surgió frente al tema del poco personal que hace parte de los 13 frentes de trabajo que desarrollan los trabajos a lo largo de las 3.823 hectáreas que conforman el distrito de riego.
“Realmente si no aumenta el personal de trabajo, esta obra no se termina en el año entrante. Hicimos un cálculo y llevan aproximadamente 45 meses en ejecución con el número de obreros y maquinaria que tienen, es decir, que con el 47 por ciento que falta se van a demorar otros tres años y medio si no se aumentan los frentes de trabajo”, puntualizó Pérez.
Según el mandatario de Tesalia, dentro del informe entregado el consorcio enfatizó que se tiene la maquinaria establecida para el desarrollo de los trabajos. “No se habló de aumentar el personal ni los frentes de trabajo, que es lo que necesitamos. La comunidad manifiesta que ya no tienen confianza en el proyecto debido a la lentitud como se está manejando las obras”, aseveró Pérez.
Problemas con la comunidad
De igual forma, se escucharon las voces de la comunidad que manifestó su inconformismo frente a algunos problemas de no pago por parte de la firma encargada del proyecto desde hace algún tiempo.
“A ellos les hace falta capacidad financiera, ya que las quejas son recurrentes sobre trabajadores que dicen les deben jornales, horas extras, liquidaciones, subcontratistas que no cancelan el valor de obras ejecutadas, quejas de proveedores, restaurantes a quienes han prestado sus servicios y tampoco se les ha cancelado”, dijo el Alcalde de Tesalia.
Frente al tema, los representantes del consorcio informaron que hoy martes se desarrollará una reunión con las personas que les están adeudando para tratar de solucionar dichos problemas y mejorar el ambiente entre la comunidad y los responsables.
Más recursos
En el encuentro, de acuerdo con los mandatarios de las localidades donde se ejecuta la obra, el consorcio Interriego manifestó que se encuentran tramitando una solicitud ante el Incoder para una posible adición presupuestal por mayor valor de obra, sin que los costos iniciales aumenten. Sin embargo, señalaron que lo único que se ampliaría son cantidades de obra que van apareciendo en la ejecución del contrato.
“Personalmente digo que no nos satisface el valor con el porcentaje de la obra ejecutada, ellos han tenido todo el tiempo para ejecutar un mayor porcentaje de trabajos. Los trabajos deberían haber terminado en febrero del año 2012 y esta es la fecha y no se ha avanzado, para nosotros es un sabor agridulce, esperábamos que el balance del proyecto fuera de siquiera un 80 por ciento para mirar que este se pueda finalizar en el 2014”, señaló Pérez.
Los afectados señalaron que de acuerdo con lo reflejado hasta el momento frente a la obra, esta no se terminará en el próximo año, sino que abarcará por lo menos dos vigencias más, generando un gran perjuicio para la comunidad beneficiaria.
Frente a la obra, la afectación social de los campesinos es inminente, ya que han manifestado que no han podido sembrar oportunamente y que el Banco Agrario los tiene literalmente ahogados por los créditos que tienen, sin ninguna alternativa para poder cumplir con sus obligaciones.
“Exigimos que el Incoder y los responsables del proyecto, que los organismos de control, que conocieron el informe presentado, tomen nota y exijan realmente al contratista el cumplimiento, ya que tienen una cantidad importante del dinero, lo que tienen que meterle es mayor empuje para poder ver el desarrollo del proyecto”, pidió el alcalde Pérez.
Conclusiones
“En términos generales, el balance fue positivo porque por lo menos conocimos el estado de las obras que hacía un año los alcaldes no conocíamos. El año pasado realizábamos reuniones para establecer compromisos con los contratistas y se analizaban el mes siguiente, pero realmente ahora sí sabemos qué pasa en realidad con la obra”, dijo Pérez.
Luego de la audiencia desarrollada, se establecieron reuniones mes a mes para conocer el estado de los trabajos y el cumplimiento de los compromisos.
“Nos vamos a reunir los alcaldes de Paicol y Tesalia, contratistas, la interventoría, algunos líderes de la comunidad y beneficiarios para establecer compromisos y analizar los balances frente a la ejecución del proyecto”, concluyó Fernando Antonio Pérez.
