Ejercer la labor de informar, en medio de una crisis, es una gran responsabilidad. El coronavirus lo ha cambiado todo en el mundo, incluyendo el periodismo que se ha adaptado a esta nueva normalidad y se está transformando cada día.
La vida cambió en todo el planeta con la pandemia del COVID-19 y el periodismo no fue la excepción. Los encargados de entregar la información diaria tuvieron que transmitir en vivo desde sus casas, adaptar sus salas en sets de televisión, cabinas de radio y salas de prensa y los reporteros en la calle entrevistan con micrófonos forrados de plástico y tapabocas, acompañados siempre por el infaltable alcohol o gel antibacterial.
Y es que mientras el mundo se detuvo, el periodismo no paró, informar, es una labor indispensable en medio de la pandemia. Seguir haciendo periodismo en medio de la amenaza de un virus que puede ser mortal, ha traído enormes retos a quienes con valentía se enfrentan al miedo del contagio y asumen desafíos que nunca habían enfrentado.
El periodista Norberto Castaño, que trabajó por más de 20 años en radio, “se reinventó” y creó su propio portal realizando un noticiero a través de Facebook, Huila Noticias, donde hoy tiene cientos de seguidores.
“Tuve que reinventarme, pasé de ser empleado a ser concesionario de espacios en radio y luego en el mes de marzo, cuando empieza la pandemia hice mi noticiero para Fecebook, con solo un micrófono y mi celular. Es algo que hay que hacer, reinventarse, porque la pandemia nos llevó a aislarnos, estar encerrados y hay que buscar alternativas, es un reto diario porque si no lo hacemos vamos a quedar en el olvido. Yo, por ejemplo, nunca había presentado y ahora es algo que hago a través de mi página y ahí la gente me puede ver ahora. Pero como siempre, lo más importante siempre será servir a la comunidad, aunque quieran callarnos”, dijo el periodista.
Para el periodista Marco Fidel Yucumá, director de noticias en Caracol Radio Neiva, pasar de la cabina en la emisora a transmitir las noticias desde su casa, ha sido todo un desafío diario.
“Durante los primeros días de aislamiento me sentí inútil e incapaz de liderar un proceso de información diaria, nos tomó por sorpresa a todos, aunque la radio no tiene un rostro palpable, si tiene una piel que se debe tocar y sentir mientras uno está al aire. Esa piel son los compañeros, el juego de micrófonos, las consolas y el nido de cables que se entrelazan para facilitar la presencia intangible entre los vehículos, las viviendas y los escenarios donde halla uno a los oyentes que son la razón de ser de cualquier estación radial”.
En marzo, completará un año transmitiendo la información desde las paredes de su hogar.
“No sabía hacer noticias sin ruedas de prensa, sin entrevistas presenciales, sin visitar y sentarme con el gobernador o sus secretarios a tomarme un café mientras me soltaban el suceso del día. A nadie se le había ocurrido pensar que un periodista podría algún día en la vida mantener informada a su región en pijama”.
La recursividad y el periodismo
Para Lucía Sánchez, periodista del diario LA NACIÓN, cubre desde el mes de marzo el día a día de la pandemia, entrega a los huilenses las cifras diarias de esta enfermedad que ha causado la muerte a más de mil opitas. Ha acudido a residencias de ancianos, centros de atención a las personas sin hogar y a diferentes municipios del departamento del Huila para relatar la pandemia desde diversos ángulos y los dramas de la violencia que no ha cesado en medio de las restricciones.
Aseguró que con la llegada de la pandemia los periodistas se enfrentan a la tarea de informar sobre la crisis del COVID-19 en condiciones de trabajo excepcionales. “A los obstáculos intrínsecos a la profesión, como las trabas para acceder a cierta información, se sumó la carga psicológica de la enfermedad y el miedo al contagio”, comentó.
Sin embargo, pese a la incertidumbre y los miedos propios en medio de la pandemia, resaltó que no hay que olvidar, que, a pesar del teletrabajo, es fundamental acudir al terreno, pues si bien el COVID-19 ha transformado el oficio, se deben conservar intactos sus principios, como el trabajo de campo.
El COVID-19 también afectó el cubrimiento de todos los eventos deportivos, muchos fueron cancelados y otros apenas están siendo reactivados, los periodistas deportivos también padecieron las consecuencias del virus y la virtualidad fue su mejor aliada.
“La pandemia fue difícil para el desarrollo del cubrimiento, las actividades deportivas se acabaron los primeros meses de confinamiento, redujeron en un 50% el salario que se tenía pactado con el medio de comunicación con el cual trabajo, se canceló el cupo publicitario al que tenía derecho, pero así y todo mantuvimos la paciencia y sacamos adelante nuestras obligaciones. Aprovechamos el crecimiento de las tecnologías, todo lo realizaba de manera virtual y conseguimos más fuentes y las comunicaciones a través de internet creció, mi página Huila Sport obtuvo mayor número de seguidores gracias a la virtualidad”, resaltó Jhon Jairo Bobadilla, director de deportes en Inrai y creador del portal Huila Sport.
“Extraño ir al estadio a cubrir los partidos de Atlético Huila, las entrevistas presenciales, ruedas de prensa, los viajes en eventos nacionales e internacionales, esta pandemia me ha enseñado a ser más recursivo y a tener paciencia desde casa”, finalizó.
Wendy Baquero, directora de noticias del canal Alpavisión agregó que “la pandemia llegó a desafiarnos y poner a prueba nuestras habilidades para salir avante a diario con nuestra labor de informar, es así como desde casa cumpliendo con las medidas de confinamiento logré apoyarme en las herramientas digitales, que permitía un contacto más cercano con las fuentes de información, esto conllevó a lidiar también con problemas de conectividad, ruidos en casa o en la calle, una situación que nos enfrentamos todos los que realizábamos teletrabajo, sin embargo esto promovió la recursividad y logré ser camarógrafa, editora, sonidista, técnica e iluminación entre otras cosas para cumplir con las emisiones del noticiero televisivo”.
Vilma Valencia, es jefe del Departamento de Comunicación Externa en Comfamiliar Huila, donde ha laborado por cinco años y el reto de informar desde las organizaciones también ha representado un cambio constante.
“En el marco de mi ejercicio periodístico de más de 10 años ha sido una transformación en la manera de realizar mis funciones ya que vinculada a una organización mi rol se enfoca no solo a informar sino al fortalecimiento y posicionamiento de la marca corporativa, creo que el éxito de mi trabajo periodístico es el manejo de las relaciones públicas “amiga y servidora” de los periodistas y comunicadores sociales de los diferentes medios de comunicación”.
“El reto más grande que he asumido en la organización, es lograr desarrollar un periodismo de marca donde se creen contenidos de marketing que generen valor e ideas virales para inspirar, educar, informar y convencer a los grupos objetivos de Comfamiliar Huila, creando un vínculo emocional con ellos”.
