Oriundo de Neiva, y con antecedentes por hurto calificado y agravado, porte ilegal de armas de fuego y concierto para delinquir, es uno de los 11 detenidos en el asalto parecido sacado de una película de acción de Hollywood. Armas largas, chalecos antibalas, motos, y un fuerte cruce de disparos se vieron en la escena. El fiscal general, Francisco Barbosa, confirmó que pese a la reacción oportuna de la Policía, sí hubo un hurto aunque inicialmente se había hablado de un intento frustrado.
Astrid Hernández Ospina
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LA NACIÓN logró conocer en exclusiva, que, uno de los 11 detenidos en el atraco de película ocurrido en Medellín, es oriundo de Neiva, viajó desde tierra huilense hasta Antioquia, donde se llevaría a cabo el cinematográfico asalto que no se logró en su totalidad gracias a la reacción de la Policía.
El hombre quien es conocido como ‘Topo’, hizo su carrera delincuencial en la ciudad de Bogotá donde vivió varios años, recientemente se encontraba en el Huila, desde donde viajó hasta Medellín, para reunirse con la cúpula de delincuentes que pretendían cometer el millonario atraco. Tiene antecedentes por hurto calificado y agravado, porte ilegal de armas de fuego y concierto para delinquir.
Presuntamente, viajó en moto, y gracias al sistema de rastreo de alta tecnológica en materia de seguridad de la ciudad de la Eterna Primavera, se logró identificar el recorrido del vehículo que se encuentra en poder de las autoridades.
$50 millones de recompensa
Por lo menos por cuatro delitos deberán responder los once capturados en el cinematográfico hurto a una fundidora de oro, en un sector del Poblado, en Medellín.
El director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, aumentó de 10 a 50 millones de pesos la recompensa por los delincuentes que faltan por capturar y que participaron en el ilícito.
Según el general Vargas, se tienen elementos suficientes para identificar a quienes hicieron parte de esta acción criminal, y que son miembros de dos estructuras delincuenciales que operan en las comunas de Robledo y 12 de octubre.
“Tras las investigaciones preliminares y gracias al trabajo rápido de la Policía Medellín, se lograron las capturas, pero también verificar que sí se hurtaron elementos por $500 millones. Se llevaron una escopeta, un radio, un chaleco, 3.148 gramos de oro sin procesar, que está avaluado en la suma de $550 millones. Es decir, el hurto alcanzó a ser consumado”, dijo el fiscal general Francisco Barbosa.
Por otro lado, ante un juez en Medellín serán presentados los once capturados en el sitio. Serán judicializados, por lo menos, por cuatro delitos que son hurto calificado agravado, porte ilegal de armas de fuego, receptación, porque algunas de las cinco motos incautadas y utilizadas en este cinematográfico intento de robo eran robadas y por hurto por insumos debido a que se llevaron algunos elementos para fundir oro.
De los 11 capturados, 7 tienen antecedentes penales, 3 llegaron de la ciudad de Bogotá, 1 de Huila y 1 de Sucre. Se mantienen las investigaciones en cuatro puntos donde se identificó se reunió este grupo criminal.
El frustrado atraco según fuentes de inteligencia, venía siendo planeado desde hace varios meses, por dos estructuras delictivas que con anterioridad habían cometido acciones similares en la ciudad; además, reuniendo gente con experiencia delincuencial, intentaban fortalecer el andamiaje criminal y así lograr el robo de película.
Dentro de los elementos en poder de las autoridades se encuentran, siete chalecos antibalas, seis pistolas e igual número de proveedores debidamente cargados con munición, y una subametralladora, varias motocicletas entre otros elementos.
Al descubierto
Con media cuadra despejada, incursionaron cerca de 30 compinches, que llegaron repartidos en la volqueta, en una camioneta y varias motos. Llevaban pasamontañas, chalecos antibalas, overoles, pistolas, subametralladoras y fusiles con silenciador. La volqueta que usaron tenía reforzamiento de metal adelante. Al vigilante lo encañonaron, despojaron de sus armas, mientras afuera el resto de delincuentes hacían lo propio.
En simultánea, uno de los trabajadores de la fundidora apretó el botón de pánico, por lo que la Policía despachó refuerzos a la zona y comenzaron las coordinaciones con las cámaras del sistema 123.
Cabe destacar que, la situación se puso al descubierto, cuando una patrulla de la Policía por cuadrantes detectó la actitud sospecha de un sujeto, que, haciendo las veces de agente de tránsito, trataba de supuestamente controlar el tráfico en el sector, pero se puso nervioso al notar la presencia de una patrulla y advirtió a sus secuaces de la presencia de la autoridad en el sitio.
“Es así que una patrulla que viene haciendo su recorrido del modelo nacional de vigilancia por cuadrantes intercepta a un primer delincuente, que se encontraba en una esquina del lugar donde ocurrieron los hechos, este delincuente cuando ve la patrulla se asusta, avisa a los demás delincuentes que estaban al interior del establecimiento e inicia un enfrentamiento”, explicó el general Javier Martín, comandante de la Policía del Valle de Aburrá.
“Uno de los asaltantes que resultó herido en la reacción de las autoridades perdió un riñón y tendrá que someterse a diálisis de por vida”, afirmó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero.
