En la plaza de San Pedro, en el Vaticano, se llevaron a cabo las exequias del papa emérito Benedicto XVI. A la ceremonia asistieron 130 cardenales, 400 obispos y casi 3.700 sacerdotes.
Redacción Web/LN
Hoy en la madrugada colombiana se llevaron a cabo las exequias del papa emérito Benedicto XVI. En una plaza de San Pedro envuelta en un manto de neblina, miles de fieles se congregaron para participar en la misa exequial de Joseph Aloisius Ratzinger y darle su último saludo.
A la ceremonia asistieron personas de todas las edades y nacionalidades, jóvenes, laicos, sacerdotes y también familias, monjas, grupos de Italia y Alemania, con banderas y pancartas.
La homilía
La misa estuvo liderada por el papa Francisco, en lo que sin dudas marcó un hecho histórico en la iglesia católica. El pontífice llegó en silla de ruedas, y tomó lugar en el palco, dando inicio a la celebración fúnebre, concelebrada por unos 130 cardenales, 400 obispos y casi 3.700 sacerdotes.
En su homilía, reflexionó sobre la lectura del Evangelio de San Lucas 23, 46, deteniéndose en particular, en una frase de Jesús en la cruz: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”.
“Son las últimas palabras que el Señor pronunció en la cruz”, remarca Francisco, “su último suspiro capaz de confirmar lo que selló toda su vida: un continuo entregarse en las manos de su Padre. Manos de perdón y de compasión, de curación y de misericordia, manos de unción y bendición que lo impulsaron a entregarse también en las manos de sus hermanos”, añadió el papa.
Las grutas
El cuerpo del papa Benedicto XVI será sepultado en las grutas del Vaticano. Este lugar es una necrópolis en la que varios sumos pontífices han sido enterrados a lo largo de la historia. Dicha localización se encuentra en la Basílica de San Pedro del Vaticano, más concretamente en el subsuelo. Estas ocupan una parte de la nave central, uno de los espacios más relevantes.
Dichas grutas se encuentran entre la Basílica de Constantino y la actual. Además de las tumbas de Papas, hay ataúdes de reyes y reinas desde el siglo X. Asimismo, en el recorrido por estas grutas y sus pasillos, se pueden encontrar capillas dedicadas a diferentes santos del cristianismo. En este lugar se encuentra, asimismo, la tumba de San Pedro, una de las figuras más importantes de la historia de la religión.
Uno de los aspectos más relevantes sobre las exequias de Benedicto XVI tiene que ver con el lugar en el que reposarán sus restos mortales. Se debe tener en cuenta que la tumba en la que descansará el primer papa que renunció al cargo en más de 600 años es la de su antecesor, Juan Pablo II, quien estuvo en dicho lugar hasta el año 2011.
