Decenas de hombres armados de Hamás consiguieron infiltrarse en el sur de Israel en un fallo sin precedentes del sistema de defensa e inteligencia. El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que su país “estaba en guerra”.
Después de los ataques, el ejército israelí movilizó decenas de miles de reservistas y respondió con ataques masivos sobre Gaza. Un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel confirmó que “soldados y civiles” han sido secuestrados por militantes, pero no suministró el número de cautivos.
Números
Hasta el cierre de esta edición, los muertos en Israel por la ofensiva de Hamás ya superan los 300, mientras los heridos son más de 1.600, según han publicado medios locales, citando a fuentes hospitalarias y al Ministerio de Salud.
De los hospitalizados, al menos 300 presentan heridas de gravedad. Toda la red de hospitales de Israel está en estado de alerta máxima. Mientras, los fallecidos en Gaza son más de 230 y hay más de 1.800 heridos.
Rechazo
Este hecho generó rechazo en la comunidad internacional. Estados Unidos fue uno de los primeros que confirmó su apoyo a Israel. De hecho, el país norteamericano donará millones de dólares en material de guerra. Entre tanto, Colombia no se quedó atrás y condenó este hecho e hizo un llamado a la paz.
“La escalada de la violencia hace aún más urgente la necesidad de retomar el diálogo y un proceso de paz que conduzca a una solución definitiva que permita a israelíes y a palestinos vivir en paz y coexistir dentro de fronteras seguras acordadas mutuamente e internacionalmente reconocidas”, señaló la Cancillería.
