Las recientes cifras entregadas por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, sobre la alta y persistente desocupación en Neiva muestran a una ciudad que requiere con urgencia un ambicioso plan, con metas a corto, mediano y largo plazo, para darle puestos de trabajo a miles de personas.
Los datos presentados por la entidad gubernamental son un golpe de realidad: la tasa de desempleo está en la capital del Huila en 13,3%, muy por encima a la tasa nacional que se encuentra en el 9,6%. Ahí de entrada se corrobora el momento crítico por el que pasa la ciudad en materia de ocupación laboral.
¿Qué representa ese 13,3%? De acuerdo con el propio Dane, el 13,3% significa que 21.000 personas ahora mismo están sin un empleo formal. Hace un año para esta misma época la cifra de desempleados estaba en 19.000.
Estamos hablando, entonces, de 21.000 personas que deben estar pasándola mal por cuenta de no tener ‘camello’. Quienes han estado cesantes saben lo que implica no tener empleo: caen los ingresos, empieza a faltar la comida, se acumulan las deudas, los hogares se descomponen y las dificultades afloran.
En medio de este panorama, vale la pena echar un vistazo a otras cifras que el Dane ha entregado sobre el mercado laboral en Neiva: la población ocupada bajó de 139.000 a 138.000 personas, de las cuales el 48% es trabajador informal. Además, la población fuera de la fuerza laboral –quienes no les interesa o no están buscando trabajo- ascendió de 263.000 a 266.000.
El Dane ha explicado que la alta tasa de desocupación se ha originado principalmente en el sector de administración pública, defensa y atención de la salud humana, actividades de práctica odontológica, de hospitales y clínicas; trasporte público, actividades de mensajería; y en el sector de la construcción.
Ya es hora de dejar de mirar para un lado frente al fenómeno del desempleo. Neiva necesita un plan claro para darle empleo a la ciudadanía.
