Ha habido un nuevo fallo fiscal relacionado con el distrito de riego Tesalia-Paicol, el mega-elefante blanco que avergüenza desde hace una década a los huilenses y que hasta ahora ningún gobierno nacional le ha ‘metido la mano’ para terminarlo y volverlo útil.
La decisión, tomada por la Contraloría General de la República, obliga a una empresa española y otra de Barranquilla, asociada al grupo Nule, a que devuelvan los recursos públicos que recibieron ($18.338 millones) por obras que nunca realizaron o por actividades que no terminaron en la ejecución de la primera fase del fallido distrito.
“Se probó que los contratistas no cumplieron con las especificaciones técnicas y las obligaciones pactadas en el contrato que conllevó al descuento de obra en el acta de liquidación, con lo que su participación le representa la imposición de responsabilidad fiscal a título de culpa grave”, fue la conclusión del organismo de control.
Tal como lo informó esta semana LA NACIÓN, deberán responder la empresa española Mondragón Soluciones Sucursal Colombia (disuelta y en estado de liquidación), dueña del 53% del consorcio y la empresa barranquillera H&H Arquitectura (hoy Hidrus S.A), asociada al grupo Nule.
Vale la pena recordar que todo empezó en el año 2009 cuando fue adjudicado el primer contrato para el distrito de riego Tesalia-Paicol. Este primer contrato costaba inicialmente 78.652 millones de pesos con un plazo de ejecución de 25 meses. Sin embargo, recibió 108.340 millones de pesos (29.688 millones adicionales), según el último dictamen fiscal. La idea era que el distrito entrara en operación en 2011, pero nunca despegó. Al final, el proyecto quedó literalmente botado.
Lo que cualquier ciudadano esperaría es que la acción de los organismos de control fuera más rápida ante hechos tan evidentes como una obra inconclusa o inservible. Pero, algo es algo. Ojalá, en este caso, el fallo fiscal tenga repercusiones y que la plata que se logre recuperar, sirva para que algún día el distrito de riego Tesalia-Paicol sea una realidad.
