Las altas temperaturas tienen en alerta a las familias cultivadoras de piña en Nátaga, en el occidente del Huila. El calor genera riesgo de mayor presencia de plagas que pueden dañar los plantíos de esta fruta.
Por María Alejandra Ruiz Mallungo
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Los efectos del fenómeno del niño en el departamento del Huila, se han presentado desde distintos ámbitos, tales como: disminución de los afluentes de ríos e incendios forestales, lo que ha ocasionado razonamiento del agua potable para el consumo humano en diferentes sectores urbanos y rurales de la región huilense.
La agricultura también se vio afectada, como es el caso de los cultivos de piña en el municipio de Nátaga. Donde alrededor de diez familias de la vereda La Cascajosa han tenido que idear estrategias improvisadas, como tapar con periódicos los frutos del cultivo de piña para lograr salvar una parte de los productos que son fuente principal de subsistencia de sus hogares.
Claudia Marcela Cabrera, representante legal de la Asociación Rural La Cascajosa, organización de campesinos cultivadores de piña en el municipio y quien es directamente afectada por las consecuencias de El Niño, debido a que su cultivo “este año se ha visto afectado por las fuertes olas de calor, ya que el fruto de la piña se quema y causa deterioro, y esto hace que la producción disminuya”, puntualizó.
Este impacto negativo en los cultivos de los productores de piñas en Nátaga, afectan directamente la economía familiar de todos aquellos agricultores, debido a que “acá acostumbramos a sembrar de a poquitos, de a diez mil, quince mil y a los dos meses otras quince mil”, pues las siembras y cultivo de piña dentro de la asociación, se intenta realizar de la manera más limpia posible de químicos y veneno.
De ahí la preocupación por las permanentes altas temperaturas, pues la sequía abre la posibilidad de que las plagas ataquen con más fuerzas el fruto” la mosca, ella viene y deposita sus huevos ahí, aunque usted ve el fruto muy sano, cuando lo pela, está todo negro por dentro”.
Mayor riesgo de plagas
Al respecto, el ingeniero agrónomo, Henry Mauricio Salas en diálogo con LA NACIÓN, nos habló con más profundidad sobre los efectos que generan las oleadas de calor en cultivos frutales, ya que hay que partir entendiendo que “las plantas son seres vivos, y al igual que todos nosotros, ellos tienen unos requerimientos hídricos vitales diarios para subsistir”, lo que convierte a las altas temperaturas en un entorno agreste para que las plantas de piña puedan dar sus frutos.
Agregado a lo anterior, Salas hace énfasis, de que las altas temperaturas pueden “generar pérdidas en la producción y el cultivo en general, porque se seca la planta”, también hay un riesgo muy alto de que plagas que suelen ser más presentes en periodos secos o de altas temperaturas, puedan atacar los frutos de los cultivos, en el caso de la piña, las probabilidades de que “las chizas ataquen las raíces de las plantas” provocando la muerte del cultivo.
No hay reportes a instituciones
Aunque éstas problemáticas se han venido evidenciando en distintos cultivos, desde la Secretaría de Agricultura departamental, aseguraron no tener aún “reportes sobre las afectaciones a los cultivos de piña del municipio de Nátaga”, pues no ha llegado información al respecto. También indagamos con la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres del Huila, para conocer si han recibido informes al respecto, quienes al igual que la Secretaría, afirman que no han recibido reportes sobre estas problemáticas que afectan a los cultivos de piña en dicho municipio, ni de ninguna otra problemática de cultivos frutícolas de otros municipios del departamento del Huila.
Al preguntar a Marcela Cabrera por qué no han hecho reportes sobre la situación ante las instituciones correspondientes, nos comenta que: “a esas entidades no nos hemos dirigido, no hemos hecho ningún reporte, ni a la Alcaldía de Nátaga. porque nunca nos tienen en cuenta en nada”, pues al ser Nátaga un municipio principalmente productor de café, los pequeños productores de frutas se sienten “marginados, ya que en Nátaga se habla es de café”.