Tras varias semanas de grandes tensiones y de presiones, incluyendo el repudiable asedio protagonizado por un grupo de personas al Palacio de Justicia en Bogotá, la Corte Suprema de Justicia eligió esta semana a la abogada Luz Adriana Camargo Garzón como la nueva fiscal general de la Nación. Su nombre, que hacía parte de la terna remitida el 26 de septiembre pasado por parte del presidente Gustavo Petro, logró el apoyo de 18 de los 23 magistrados.
Luz Adriana Camargo es abogada de la Universidad de la Sabana, especialista en Derecho Penal y Criminología de la Universidad Libre de Colombia. Cuenta con una trayectoria profesional de más de 35 años, en los cuales ha sido juez de instrucción criminal, abogada de la Dirección Seccional de Instrucción Criminal de Bogotá, y funcionaria de la Fiscalía General de la Nación en donde fue fiscal delegada ante los jueces penales del circuito, fiscal auxiliar y fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia. Trabajó como magistrada auxiliar de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia.
Dentro su trayectoria, se destaca además que se desempeñó como jefe del departamento de investigación y litigio en la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala de la ONU. Ha sido consultora de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión e hizo parte del Equipo de Seguimiento Especial de las medidas cautelares concedidas por el secuestro de tres periodistas en Ecuador.
Frente a los colombianos está una jurista con gran experiencia y será ella quien esté al frente de uno de los cargos más importantes del país. Tiene retos inmensos como liderar las investigaciones para acabar con la impunidad en muchas de las masacres, asesinatos de líderes sociales y crímenes de firmantes de paz que ocurren a diario en el país. Dentro de su independencia, la Fiscalía no puede ser un espectador más en la escalada de violencia que sacude a regiones como el Huila.