En un hecho sin precedentes, la comunidad de la vereda El Carmen, del municipio de Isnos, se unió para oponerse a la implementación del cultivo de lulo que se pretende realizar en seis hectáreas, propiedad de Cecilia Peña Pino.
Las alarmas se prendieron por los habitantes de las veredas El Carmen y Villa del Prado, argumentando que los fungicidas utilizados para los cultivos afectan la salud, el medio ambiente y reclaman el derecho a la vida, como lo manifestaron en la solicitud presentada ante el personero de Isnos, Luis Carlos Rocero.
El Personero dio trámite al memorial, el cual fue firmado por 40 familias y remitió la queja a los organismos ambientales, como la CAM y la Procuraduría Agraria, quienes se encargaron de realizar la visita al sitio donde se instalaría el cultivo.
La comunidad en cabeza de sus líderes han expresado que bajo ninguna circunstancia permitirán que en un lote ubicado en medio de su vereda se sitúe un cultivo de lulo, el cual estaría afectando a los niños de un hogar infantil establecido en dicho sector, con 45 menores.
Las fumigaciones afectarían en un determinado tiempo la salud de los menores, además de perjudicar a toda la población de El Carmen, Villa del Prado y Remolino.
Habla la comunidad
Diana Marcela Ordóñez, presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Carmen, señaló que “los habitantes nos opusimos al ingreso de un tractor que llegaba para arar el lote. Aquí estamos unidos y la decisión es la oposición para evitar que en nuestra vereda se cultiven seis hectáreas de lulo. Ya lo decidimos en una asamblea comunitaria de la Junta Comunal, además recogimos firmas que en un oficio se le entregó al señor Personero, para hacer valer nuestros derechos; asimismo la comunidad se pronunció al salir a la vía y no dejar entrar el tractor cuando se disponía a iniciar el arado”, dijo la dirigente comunal.
Con la protesta se logró que el trabajo se suspendiera hasta tanto el procurador agrario se haga presente, porque la decisión es no dejar instalar el cultivo que harían unos particulares en el lote ubicado cerca de una fuente hídrica, a la capilla, el hogar infantil y muy cerca de las viviendas.
El representante de los usuarios del acueducto, Luis Alberto Iles, también se unió a esta propuesta, diciendo que “no permitiremos que el agua del acueducto se utilice en las fumigaciones”.
Así las cosas, los directivos y usuarios del acueducto de El Carmen en Isnos dijeron no estar dispuestos a que el propietario del cultivo, Pablo Scarlante, utilice el acueducto, que es de agua tratada, para regar una plantación de lulo ni muchos menos permitir instalar un cultivo que al fumigarlo va a afectar a todos los habitantes.
La Personería
Que prevalezca el interés general al particular es el mensaje que da el Personero de Isnos, quien manifestó que ha venido escuchando a todas las partes inmersas en el tema, pero que en aplicación a las normas ambientales y la Constitución “prevalece el interés general sobre el particular”.
Por esta razón se convocó a una reunión a la cual asistió la CAM, la Secretaría de Salud y los voceros de la comunidad, mientras los implicados del cultivo no asistieron al lugar.
Los promotores del cultivo de lulo al ser interrogados sobre el caso prefirieron guardar silencio y la Personería les ha solicitado abstenerse de implantar el cultivo hasta tanto haya claridad sobre el particular por parte de la Procuraduría Agraria y los organismos ambientales.