Por medio de sus redes sociales, el congresista del Pacto Histórico, Wilson Arias informó que denunció ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) a cinco partidos políticos, por recibir financiación extranjera y de EPS.
Redacción Web/LN
El senador del Pacto Histórico Wilson Arias informó que denunció ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) a cinco partidos políticos por la financiación que habrían recibido durante el año 2022 por parte de la empresa extranjera Keralty y de otros conglomerados económicos dueños de EPS, recursos que, presuntamente, habrían terminado en las campañas de los congresistas de esas colectividades.
En su denuncia, que hizo pública a través de redes sociales, el congresista petrista mencionó al Centro Democrático, a la Alianza Social Independiente (ASI), al Partido de la U, al Partido Liberal y al Partido Conservador.
“La ley 1474 de 2011 es clara: se prohíbe a las EPS hacer donaciones a las campañas. Por su parte, el inciso ocho del artículo 109 de la Constitución prohíbe la financiación con fines políticos y electorales de extranjeros. Y la ley 1475 de 2011 prohíbe a los partidos recibir financiación directa o indirecta de personas naturales o jurídicas extranjeras”, explicó Arias.
Acabo de denunciar en el CNE a @CeDemocratico, ASI, @partidodelaucol, @PartidoLiberal y @soyconservador
Todos esos partidos recibieron más de $640 millones en donaciones de empresas extranjeras y dueñas de EPS en año electoral
Ambas fuentes de financiación prohibidas por la ley pic.twitter.com/yAABwxpERV
— Wilson Arias (@wilsonariasc) March 30, 2024
De acuerdo con los datos que compartió el congresista, el partido que lidera el expresidente Álvaro Uribe Vélez recibió $35 millones de Keralty, una empresa extranjera dueña de la de EPS Sanitas, y $302 millones del conglomerado económico Bolívar, dueño de la EPS Salud Bolívar.
El senador petrista aseguró que envió una copia de esta denuncia a la Fiscalía, que ahora está en manos de Luz Adriana Camargo. “Partidos y senadores estarían legislando contra la reforma a la salud porque sus financiadores se verían afectados al dejar de recibir los $80 billones anuales que le da el Estado. No están preocupados por tu salud, sino por mantener un negocio muy rentable para ellos a costillas del Estado”, aseguró Arias.
Con información de: El Espectador