Resulta satisfactorio que avance sin tropiezos el proceso de restauración ecológica de la cobertura boscosa del Corredor Andino Amazónico que se viene ejecutando desde hace tres años en el departamento del Huila. La importancia es enorme porque nos estamos refiriendo a un corredor natural en el que se encuentran cuatro Parques Naturales Regionales (Corredor Biológico Guácharos- Puracé, Cerro Páramo de Miraflores; Siberia-Ceibas; Páramo de las Oseras), dos zonas de amortiguación de Parques Nacionales (Guacharos y Sumapaz), y tres complejos de Páramos (Miraflores, Picachos, y Cruz Verde Sumapaz). Es además una zona en donde se desarrollan importantes actividades productivas agrícolas asociadas al café (el 32% del total del departamento), cacao (el 59% del total del departamento), arroz, frutales y cítricos y la actividad ganadera.
Como es de conocimiento público, el proyecto Corredor Andino Amazónico es una iniciativa que se viene ejecutando en el Huila a través de la alianza entre la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena, CAM, la Gobernación del Huila y Conservación Internacional con el objetivo trabajar de manera conjunta por la protección, conservación y fortalecimiento de este corredor natural del departamento.
Y el más reciente reporte es que se han sembrado casi 125.000 plantas en 45 veredas de los municipios de Colombia, Gigante, Tello, Guadalupe, Garzón, Algeciras y Acevedo, en el marco del componente de restauración de los paisajes cafeteros y cacaoteros. Se trata de 284 predios en los que se viene adelantando este proceso de restauración ecológica a través de enriquecimiento de coberturas sucesionales, cercas vivas y sistemas agroforestales.
Esta clase de noticias son un ‘oasis’ en medio de las dificultades por las que pasan varios municipios del Huila debido a los problemas de orden público. Es un mensaje de que en las regiones no se puede olvidar la protección de nuestro recurso hídrico.